Prólogo

"Tiffany unnie, Tiffany unnie despierte porfavor" la voz de una mujer retumbaba por la habitación de una castaña que dormía placidamente. "Cinco minutos más" dijo mientras se tapa hasta la cabeza con las cobijas. Acaso era mucho pedir que la dejarán dormir un poco más, ayer se había quedado trabajando en un caso especial y ahora viene su amiga y interrumpe su sueño. "Lo siento unnie pero sino se levanta llegaremos tarde" hablo la menor de voz chillona de nuevo. "¿Qué hora es?" pregunto resignada. "Cuarto para las ocho" respondió la menor con total tranquilidad. "Ahh, espera cuarto para las ocho" grito alarma, se levanto pero cayo en el proceso. "Yoong porque no me despertaste antes" reprendió a la rubia de cara bonita. "Lo intente varias veces pero usted no me hizo caso" dijo restandole importancia. "Debiste tirarme un vaso de agua fría o yo que se" caminaba de un lado a otro intentando ponerse la ropa. "Bueno unnie, la espero afuera" y sin mas, la menor salio del cuarto de la castaña. 

Diez minutos después, la castaña salió puesta un pantalón jean, una blusa blanca y unas botas negras con poco tacón. "Yoona, Seohyun ya estoy lista" grito a sus amigas pero ninguna le respondió. "Sorpresa" gritaron dos chicas. "Pero que..." fue lo unico que alcanzo a decir, puesto que su voz no salía de su garganta. "Feliz cumpleaños Tiffany unnie" dijeron a la misma vez dos chicas mientras abrazaban a la castaña. "Gracias chicas" pequeñas lágrimas salían de los ojos de la coreana americana. "Entonces lo de que llegabamos tarde era mentira, ¿verdad?" Pregunto la castaña con tono de reproche. "Lo sentimos unnie, pero sino te deciamos eso no despertarías nunca" comentó la maknae. "Oye" grito la americana y todas empezaron a reír. 

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"Si ven ahora por su culpa llegaremos tarde" decía una joven mientras corría a toda prisa. "No fue mi culpa unnie, solo a Yoona unnie se le ocurrió tirarse medio pastel de chocolate encima" recalco la pelinegra riéndose bajito. "Yah Joohyun no fue así" dijo mientras realizaba un puchero. "A no y entonces que fue lo que paso. No me digas que el pastel estaba vivo y se cayó por si solo en tu ropa" pregunto con una ceja encarnada en el rostro. "Es que el pastel estaba delicioso y..." no pudo completar la oración porque una castaña la interrumpio. "Ok. Basta, toda la gente se nos queda viendo raro por su tonta discusión" dijo un tanto enfadada por el comportamiento infantil de las menores. "Lo sentimos unnie" se disculparon de forma simultanea. "Como sea" respondio la americana. 

Las tres chicas retomaron su camino de forma tranquila, sin discutir sobre el tema del pastel. Pero tenía que admitirlo esa escena fue muy graciosa solo que no lo había demostrado. En fin no quería tener una actitud infantil delante las dos menores. Tenía que ser un ejemplo, siempre lo había sido. Tener a esas dos muchachas como amigas a veces era una tarea difícil, más si se trataba de la rubia bromista que tenía por mejor amiga. Había pensado varias veces la forma en como matarla, pero luego recapacitaba y pensaba en su fuero interior que su vida no tendría sentido sin aquellas hoobaes. 

Las amaba, tenían una amistad pura, esas relaciones de hermandad donde las tres se apoyaban mutuamente, y eran la energía que necesitaban cada una.

Se habían conocido en la escuela de policía, no tenían mucho en común, pero ser distintas ayudaba a no entrar en monotonía. La más seria de las tres era la pelinegra de nombre Seo Joohyun o como prefería que la llamen Seohyun ella las mantenía en equilibrio, era la cabeza del grupo por así decirlo. La rubia de nombre Im Yoona o como prefería que la llamen Yoona, Yoong era la mas bromista pero de gran corazón y por ultimo la castaña de hermosa sonrisa era Stephanie Young Hwang o Tiffany como sus amigos la llamaban, un poco infantil, amante del rosa y un tanto celosa sin duda la chica era amigable, de buen corazón, respetuosa y sincera. Ella sería capaz de dar la vida por alguien quien ama si fuese necesario, ella era la agente de policía más respetada por sus compañeros, con un trabajo destacado al igual que sus amigas, convirtiendola así como superior de un escuadrón de las fuerzas especiales quienes se encargaban de convatir el crimen y mantener la paz en el país. 

Aparentemente estas tres jovenes serían las protagonistas de una particular historia de amor, donde tendrán que elegir entre sus sentimientos o su deber con toda una nación.