capitulo 10

UN TOQUE DE GRECIA.

Taeyeon se apoyó en un árbol que bordeaba la calle Battery, y se hubiese visto como cualquier otra turista disfrutando del sol de la mañana. Pero debajo de sus párpados medio cerrados, nada escapaba a su observación. Como un halcón, había estado observando la puerta de entrada de la casa de Tiffany desde el amanecer.

Dejó que sus ojos recorrieran la impresionante casa de la época de la preguerra, que fácilmente competía en tamaño con la casa de sus padres bajo el agua.

Se levantaba tres pisos de espacio habitable. El segundo y el tercer piso estaban adornados con grandes porches en un lado de la casa y pequeños balcones en el otro. Las habitaciones del primer piso tenían puertas ventanas, que se abrían al gran jardín privado escondido detrás de una masiva valla de hierro forjado. Junto a ella, arbustos y árboles jóvenes proporcionaban privacidad al gran lote.

Estaba sorprendida de que una joven como Tiffany viviera en una casa tan grande como esta. Fiándose en sus observaciones durante toda la noche... en la cual no había podido dormir... se había dado cuenta de que vivía ahí sola.

Hace media hora, taeyeon había visto entrar trabajadores en la propiedad, y pudo escuchar el ruido de la construcción del tercer piso. Eso y el gran camión de basura fuera de la propiedad, le decía que se estaban efectuando trabajos de renovación importantes en la casa. Hasta el momento, no había visto a nadie salir o entrar en la casa. Con el pie, taeyeon  movió a Dioniso que estaba sentado al pie del árbol.

— ¿Estás durmiendo?

Su amigo soltó un bufido, pero no se levantó.

— Tienes razón, lo estoy.

Nadie se levanta a esta hora infame. Podríamos por lo menos haber desayunado.

— No tengo hambre.

Dioniso dejó escapar un resoplido.

— Típico. ¿Cuándo se te ocurrirá pensar en alguien más que en ti misma? Tengo hambre. Conozco un lugar que hace la mejor sémola con tocino y...

— ¿Qué pasa contigo y la sémola? — La noche anterior, Dioniso la había arrastrado a un restaurante e insistió en que probara sémola.

Su amigo se puso de pie y se sacudió los pantalones.

— Es algo bueno.

Además, cuando bebes tanto como yo, necesitas una base de buena comida para conservar las fuerzas.

— ¿Alguna vez pensaste más bien en controlar tu consumo de alcohol?—

Taeyeon se burló de él y se preparó para la reacción de su amigo.

— ¿Por qué en el Olimpo haría tal cosa? ¿Te sientes bien? Obviamente no, de lo contrario no saldrías con una idea tan estúpida. Bueno, no es que hayas tenido ideas brillantes últimamente.

Taeyeon desestimó el insulto encogiéndose de hombros.

— Mi plan es brillante, y estás celoso porque no fue tu idea, y no serás capaz de recibir crédito

Por ello.

— Eres una idiota, y era mi idea.

— Yo también te quiero, — replicó taeyeon— Así que, ¿ya sabes qué hacer?

Dioniso, aburrido asintió con la cabeza.

— Cuando la enfermera llegué aquí, voy a distraerla, usaré mi considerable encanto y me la llevaré. Bla, bla, bla. Voy a distorsionar su sensación de tiempo para que no sepa cuánto tiempo la mantuve, y tendrás vía libre. Es mejor que uses bien el tiempo, no estoy acostumbrado a estar con la misma mujer durante demasiado tiempo.

La mirada de fastidio de Dioniso hizo reír a taeyeon. Su amigo sólo tendría que soportarla durante una semana o dos. ¿Qué tan difícil podía ser? Y con un poco de suerte, la enfermera podría llegar a ser una distracción agradable para Dioniso, y tal vez incluso le enseñaría un par de cosas.

— Incluso tu regla de tener una relación de una sola noche está hecha para romperse. Disfruta, — dijo taeyeon.

— Lo dice la Srita. Ningún Compromiso. Me pregunto qué dirías si estuvieras en mis zapatos.

Taeyeon le dio una risa seca.

— Pues ponte calcetines. Tengo que tener un romance con esta mujer por una semana o incluso dos y tengo que hacer que se enamore de mí. Será una verdadera tortura.

Una verdadera tortura, con certeza. Ya ahora, casi no podía desterrarla de su mente. La noche anterior el sólo pensar en estar con ella hoy, había hecho picadillo sus esfuerzos por conseguir una noche de buen sueño. Su cuerpo palpitaba de necesidad con sólo pensar en sus exuberantes curvas, su piel suave y su aroma embriagador. Y dentro de su pecho surgió el deseo de estar cerca de ella, pero hizo caso omiso a la extraña sensación y en su lugar, se concentró en su deseo por ella.

Si no ponía sus manos sobre ella pronto, y su cuerpo se sumergía en su calor, estallaría en llamas más calientes que el Hades. La lujuria que se apoderaba de ella cada vez que pensaba en ella, había puesto a su coño en un estado permanente de semi excitación sólo para aparecer totalmente palpitante y húmedo, cuando su mente se quedaba pensando en ella durante más de cinco segundos. Bueno, sus cinco segundos se habían terminado... de nuevo.

— Ahí.

La mirada de taeyeon siguió el brazo extendido de Dioniso, que apuntaba a una persona que caminaba hacia la casa de Tiffany.

— Es hora de actuar, — anunció taeyeon y se movió.

Dioniso la retuvo por su brazo.

— Nuestro acuerdo se acabó.

— No puedes echarte para atrás. Tú lo prometiste.

Dioniso le dio una mirada de disgusto.

— Yo sé lo que prometí. Pero eso no incluía esto. — Hizo un gesto hacia la persona, que ahora estaba en la puerta y estaba tocando el timbre.

— Ese, es un hombre.

Taeyeon se encogió de hombros.

— ¿Y? Usa tu imaginación.

— ¿Y hago qué?

— Lo que mejor sabes hacer.

Dioniso negó con la cabeza.

—De ninguna manera. No iré allí, ni siquiera por ti.

Taeyeon agarró del brazo a su amigo y lo arrastró hacia la casa.

—Sólo llévalo a beber, ¿qué tan difícil puede ser eso?

Una risa nerviosa dejo escapar el pecho de su amigo.

— ¿Beber? Claro, sí, por supuesto, tienes razón.

Taeyeon le dio una mirada inquisitiva.

— ¿Qué estabas pensando?

— Nada. No importa.

Un momento después, llegaron a la puerta donde estaba el hombre, y Dioniso le dio unas palmaditas en el hombro. Cuando giró, Taeyeon miró el rostro de un hombre de unos treinta años, atractivo, pero no excesivamente guapo. Su piel era color chocolate con leche y sus ojos eran una mezcla de gris y azul.

— Perdón, — comenzó a decir taeyeon, — ¿Has venido a ver a Tiffany Hwang?

El hombre asintió con la cabeza. — Sí, la agencia me envió.

— Ah, sí, ha habido un ligero cambio de planes, — Dioniso intervino en la conversación.

Taeyeon vio cómo su amigo miraba los ojos del enfermero y usaba sus poderes hipnóticos. Unos segundos más tarde, puso su mano sobre su hombro, y se lo llevó. Taeyeon no tuvo tiempo de ordenar sus pensamientos cuando la puerta se abrió de repente.

El hombre de baja estatura se limpiaba las manos de las manchas de pintura en los pantalones que estaban igual de sucios, mientras la miraba.

— Supongo que no eres el electricista, — afirmó con total naturalidad.

Taeyeon se aclaró la voz, contento de tener unos minutos más antes de que ella volviera a ver a Tiffany otra vez. Necesitaba unos momentos más para poner bajo control su corazón que golpeaba con fuerza. El porqué latía como un martillo neumático, no lo sabía.

— Estoy aquí para ver a la señorita hwang, ¿Tiffany Hwang?

El trabajador señaló con el pulgar hacia la escalera detrás de él.

— La vi en la cocina.

Taeyeon pasó por el lado del hombre.

— Sin embargo, yo no iría allí en este momento, — el pintor arrastró las palabras detrás de él. —Ella no está de buen humor.

Taeyeon levantó una ceja, pero no dejó que esa información le impidiera su propósito. Pero no estaría de más tener la información completa.

— ¿Qué pasa con ella?

El hombre sonrió.

— Es una potra testaruda... no le gusta cuando un hombre le dice qué es lo mejor para ella.

— Como si eso fuera una sorpresa, — murmuró taeyeon.

Ella ya se había formado su opinión de Tiffany esa noche en el club. La mujer era testaruda y obstinada, tanto como era hermosa y y. Y si no fuera por esta última, ni siquiera estaría ahí, ¿verdad? Por lo menos, con el tiempo obtendría su justa recompensa por aguantarla.

Y aunque ella sabía en su cabeza que su recompensa sería ir a casa, su cuerpo estaba en la búsqueda de una recompensa totalmente diferente... una que estaba lista para tomar al instante si escuchaba la rigidez de su cuerpo.

— Creo que tal vez tenga lo que ella necesita, — le dijo al trabajador.

Y si le dejaba usarlo en ella, se llevarían espléndidamente.

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Comments

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JoyReneluv2
#1
Hola!!!
Esta es una de las mejores historias que he leído, aunque realmente la primera vez que la leí fue en wattpad, y esto me lleva a una pregunta.
¿Estas de alguna forma relacionado a la autora en wattpad? No lo tomes a mal, es que su contenido de la nada se borro y habían muchas historias que me gustan que estaban en curso.
Solo quiero saber si las publicara aquí, o abrirá nuevamente una cuenta allá, aun así, me encanta esta y varias de las historias que tienes aquí.
Gracias por publicar estas magnificas historias.
roguecr #2
Chapter 36: Gracias x la historia . Esta muy bonita
LlamaAmerica #3
Chapter 36: Gracias por esta historia estuvo muy genial y divertida jajajaja la verdad me gustó mucho!!! <3 <3
taeny39
#4
Chapter 36: cool
Skyth06
#5
Chapter 36: Valió la pena esperar yay!
LlamaAmerica #6
Chapter 30: Uhhhh regresaste *-* <3
TaeNy0204 #7
Chapter 29: Cuando actualizas? Por favor... necesito leer más
LlamaAmerica #8
Chapter 29: Que carajos con Zeus :@
Skyth06
#9
Chapter 29: Ese Zeus. !!
Skyth06
#10
Chapter 28: Joooooooder ;-;