Call my name

Call My Name

“I will always be with you…”

 

El teléfono de cada una comenzaba a sonar con un mensaje diferente. “Taeyeon-” La bajita observó a Tiffany que se recostaba sobre su cama sin dejar de mirar el teléfono. “… ¿Sabes de qué se trata esto?” Negó suavemente sin dejar de mirar el mensaje. “No quiero volver a pisar la SM hoy, estoy tan agotada.” “Será solo una breve reunión, no pasará nada.” Tiffany asintió y se levantó de la cama saliendo. “Llama a Sooyoung y pregúntale con quien se irá.” “Seguro debe ya ir camino la SM.” Taeyeon sonrió mientras la veía salir de su habitación, su sonrisa desapareció cuando volvió a mirar el teléfono. “Algo no anda bien.”

 

 

Se dejó caer en el asiento sin poder dejar de mirar al personal, al igual que todas, miraban sin poder creer las palabras que estaban escuchando, Taeyeon fijó su mirada en las chicas intentando encontrar algo que pudiese decirle que estaban bien pero cada mirada era peor que la suya. “Esa es nuestra decisión.” “¡No pueden hacerle esto!” Exclamó Tiffany poniéndose de pie y golpeando el mesón. “Era una condición señorita Hwang.” Se mordió el labio sin poder creerlo. “Pero ninguna está de acuerdo. ¿Cuál es el propósito de todo esto?” “Es cierto, se suponía que le habían permitido tener…” “Disculpen el retraso, acabo de llegar y-” Cada una de las ocho chicas desvió la mirada a la puerta, sentían miedo, rabia, tristeza y sabían que no podían hacer nada contra lo que venía. “… ¿por qué están todas reunidas?” “Bienvenida Jessica, puedes tomar asiento por favor.” La rubia observó detenidamente a cada chica y se sentó a un lado de Yoona. “¿Por qué nos mandaron a llamar Yoona?” “Yo…” “No le preguntes a ella Jessica, las mandamos a llamar para hablar con ellas respecto a lo que está sucediendo contigo.” “… De acuerdo… ¿y qué sucede conmigo?” “Jessica, debido a tu incumplimiento con el contrato y la creación de tu empresa, junto a las demás miembros de Girls’ Generation, hemos decidido que ya no puedes continuar en el grupo.” Las ocho muchachas miraron al hombre que hablaba con tanta firmeza y luego cada una volvió a Jessica. “E-Esto… no puede estar pasando… Y-yo me he esforzado mucho por esto-” Los ojos de la rubia se humedecieron “… ustedes… ¿me traicionaron?” “Jessica, nosotras no…” “Fue una decisión tomada en conjunto, y todas se sienten molestas porque haces las cosas de ésta manera.” Taeyeon desvió la mirada hacia su manager, él hablaba con la misma dureza con que lo hacía el vicepresidente de SM Entertainment. “Entiendo… veo que ya no soy necesaria…” Se puso de pie y tomó sus cosas. “No sé si deba agradecer por todo lo que han hecho por mí, la verdad… y ustedes-” Desvió su mirada a las ocho integrantes que no sabían que decir, cada una más lastimada que la otra. “… creí que eran mi familia.” La rubia salió de la sala de conferencias y el silencio volvió a reinar dentro del lugar. “Muy bien, ahora vayan a ensayar… pronto deben presentarse en el domo de Tokio y…” “¡¿Crees que no tenemos sentimientos maldita sea?!” “Taeyeon...” Yuri le miró con sus ojos llorosos, la bajita apretó el puño y se puso en pie. “No estoy de acuerdo con su estúpida decisión ¡váyanse al carajo!” Gruñó saliendo de la sala de conferencias y observó los pasillos, estaba buscándola. Corrió por los pasillos, sabía que Jessica bajaría en ascensor, no iba a permitir que la vieran llorando.

 

“Jessica no te vayas.” La tomó por el antebrazo una vez que la alcanzó en el primer piso, respiraba agitada y la rubia le miró. “¿Qué quieres ahora? ¿Vienes a hacerte la heroína? Culpa a las demás mientras tú te salvas de todo y…” “No, no es eso, Jessica por favor debes escucharme… demanda a la SM.” “¿Qué?” Preguntó sorprendida. “Tienes las de ganar… no quiero quedarme de brazos cruzados…” “Deja de decir estupideces, no quiero que te muestres tan patética-” Soltó el agarre de Taeyeon y resopló “… déjame descansar y vete a ensayar. Ya no tenemos cosas en común.” “Pero…” “¡Que te largues!” Gritó apretando sus puños, Taeyeon asintió, sentía el dolor de sus palabras pero solo comenzó a caminar alejándose de ella.

 

“Esto no está bien” Sooyoung estaba sentada en el piso abrazando sus rodillas y no dejaba de mirar al piso. “¿Por qué tuvieron que hacerlo de ésta forma? Es cruel.” “La quiero de vuelta.” Exclamó Yoona escondiendo entre sus manos su rostro cubierto por lágrimas. Yuri se acercó y acarició su espalda. “Todas la queremos aquí, no es tan divertido ensayar sin ella.” “No puedo bailar… no me siento bien para bailar hoy.” Hyoyeon se sentó a un lado de Sunny y se apoyó en ella. “¿Tú sabías que iba a pasar todo esto?” Preguntó Tiffany a la joven de labios gruesos y ella negó. “Estoy tan sorprendida como ustedes. Mi tío viajó hace un tiempo a la isla Jeju y no hemos tenido mucho contacto, no sé si la decisión habrá pasado por él.” “Tiffany ¿por qué mandaste a Seohyun a buscar bebidas?” “Porque no quiero que vea la reacción de Taeyeon…” Se mordió el labio, sabía de lo que hablaba y la puerta se abrió de golpe, la mayor entre todas pero bajita caminó, sus ojos estaban rojos e hinchados y sentía la mirada de cada una sobre ella. “No me quiso escuchar… ella… cree que le mentimos siempre.” Apoyó sus manos contra una mesa y suspiró bajando la cabeza. “¡Soy una estúpida!” Golpeó la mesa antes de tomarla por los bordes y lanzarla. “Taeyeon no…” “¡Dejé que nos manipularan de nuevo!-” Gritó pateando una silla “… ¡Jamás pude ser capaz de ser una buena líder para ustedes! ¡Dejé… que se me escapara de las manos!” Su mano iba dirigida hacia uno de los espejos pero fue detenida. “No vale la pena que te lastimes Taeyeon.” Yoona la abrazó, temblaba de miedo al haber visto a la bajita de esa manera. La mayor suspiró dejando caer su cabeza en el hombro de la joven y comenzó a llorar amargamente. “¿No volverá con nosotras Taeyeon?” Se abrió paso entre ellas la menor de todas. “No Seo… ella… ya no cree que nosotras seamos su familia.”

 

El tiempo pasaba y las chicas cada vez que intentaban comunicarse con Jessica terminaban siendo detenidas por la empresa como si cada día se fuese convirtiendo más en una pesadilla de la que no pudieran escapar. La mayor del grupo les había prometido tras el primer encuentro con sus fans en China que la traería de vuelta, pero poco había logrado, intentar que Jessica se diese cuenta que ella no había borrado ninguna foto con ella o con las chicas de su Instagram no había sido muy exitoso.

 

 

“Unnie… ¿Q-qué pasaría si te dijera… que vi a Yoona?” Jessica dejó de hacer lo que hacía cuando escuchó a su hermana menor hablar de aquella chica. “No me interesa-” Continuó pasando las páginas de la revista sin tomarle importancia, solo quería omitir el hecho de que cada día le dolía más estar lejos de las que creía eran sus hermanas. “… E-ella… ¿c-c-cómo estaba?” Krystal la observó y sonrió tristemente. “Sigues queriéndolas ¿no es así?” “Claro que no… me lastimaron… e-ellas m-me…” Las lágrimas de la rubia no se hicieron esperar y la menor le abrazó acariciando sus cabellos “E-ellas… ¿cómo pudieron hacerme esto?” “Quisiera creer que no lo hicieron unnie.” “¿De qué hablas?” Preguntó sin poder dejar de llorar. “No es nada… solo déjate querer torpe hermana.” “No soy torpe… niña tonta.” Reclamó dejando que la menor acariciase sus cabellos.

El teléfono de la menor sonó y volvió su vista a una durmiente Jessica. Se mordió el labio antes de tomarlo y contestar. “Dime.” “Por favor… Jung… dime que estás con Jessica… necesito verla.” “¿Por qué quieres tanto hablar con ella Taeyeon?” Preguntó resoplando, miraba desde la puerta a la mayor “Necesito que me escuche, quiero que sepa que todo fue un malentendido.” “¿Un malentendido? Han pasado meses desde que la sacaron… ¿Qué me haría creer que fue un malentendido?” “Déjame verla y se los explicaré a ambas… por favor.” “… Te enviaré la dirección por un mensaje-” La bajita desde el otro lado sentía que su pecho se agitaba, tenía la posibilidad de volver a verla. “… pero no debes permitir que nadie sepa en donde vivimos Jessica y yo.” “Lo prometo.”

 

 

Taeyeon dejó el teléfono a un lado de su cama, había recibido el mensaje con la dirección del lugar en donde se encontraba ahora Jessica y sentía que su corazón martilleaba contra su pecho. “Vamos Taeyeon… les prometiste que la traerías de vuelta. No tienes que tener miedo, ella no te hará daño.” Se pronunciaba sin dejar de temblar por los nervios que la carcomían día a día. Se levantó de la cama, tomó su celular, sus llaves y una chaqueta y salió de la habitación sin considerar el hecho de que todas se habían quedado mirándole. “¿Taeyeon?” La bajita se frenó en seco al escuchar la inconfundible voz de Hyoyeon. “¿Vas a algún lado?” Preguntó y le miró asintiendo, se mordió el labio, no quería decirles que sabía dónde estaba Jessica, se lo había prometido a Krystal. “Si… todo sale bien… les diré a donde voy.” Pronunció antes de salir del departamento. Corrió escaleras abajo sin poder dejar de pensar en las maneras de convencerla de que todo lo que había sucedido aquel día había sido obra del equipo de SM.

“¿Creen que haya podido contactarse con Jess?” Preguntó Yoona acariciando su taza de café caliente. “Espero que así sea.” Comentó Sooyoung mirando por el ventanal las calles. “Parecía nerviosa. ¿No habrá discutido con ese idiota?” Apretó sus puños la joven de labios gruesos. “Si discute con él o no, eso no nos incumbe Sunny. Nos lo dio a entender hace meses.” Respondió Tiffany pasándose una mano por el cabello. “Estaba hablando con Krystal-” Seohyun caminó hasta ellas y tomó asiento en la mesa mientras se servía una taza de té, las demás le miraron sin saber que decir. “… fue a verla… le pidió su dirección y le prometió algo, no sé qué habrá sido.” Añadió. “¿Por qué debe hacer las cosas de esa manera?-” Yuri preguntó bajando la vista apenada. “… siempre está haciendo las cosas a su manera, se desgasta emocionalmente por… nuestra culpa… nosotras deberíamos dejar de ser una carga para ella.” Inquirió la morena volviendo a mirarlas. “No somos una carga Yul… pero ella hizo una promesa… conozco a Tae-Tae y ella no se va a rendir hasta cumplir con su promesa.” Señaló Tiffany.

 

 

La menor dejó pasar a Taeyeon, le indicó que se sentara mientras intentaba despertar a su hermana que se había vuelto a quedar dormida. “Ni aunque pasaran años cambiarías eso de ti.” Sonrió para sus adentros pensando en el apodo que le había dado antes de que todos la conocieran como Ice Princess “Dulce monstruo dormilón.” Susurró y se mordió el labio. El silencio reinaba en esa habitación amplia e iluminada. Observaba hacia todas las paredes, como siempre, estaba todo bien decorado por la rubia junto a su hermana; y Taeyeon no pudo evitar embriagarse en una oleada del perfume de la joven que le seguía en mayoría de edad entre el grupo. “¿Taeyeon?” Se tensó, no estaba lista para escuchar esa voz pronunciando su nombre. “¿Qué haces aquí?” Se levantó y al mirarla sus músculos se volvieron más duros.

Intentaba hablar, decir algo pero todo lo que salía de su boca eran sonidos raros. “¿Por qué viniste a mi hogar?” “Y-yo… que-quería verte.” Jessica se cruzó de brazos y le miró con la misma frialdad con la que miraba a un desconocido. “Ya me viste… puedes irte.” Pero por dentro, la rubia estaba muriéndose de nervios. Al momento en que despertó y su hermana le había comentado que Taeyeon la estaba esperando en el salón, se había hecho un lío en su cabeza. “No… me iré cuando te aclare todo.” “Taeyeon… eso pasó hace meses, no quiero escuchar algo que me vuelva a herir y…” “Es que debes saber toda la verdad… fue un malentendido.”

 

Jessica le indicó que volviera a tomar asiento y ella obedeció sin dejar de observarla. “Puedes continuar entonces, ¿a qué te refieres con que fue un malentendido?” La mayor se mordió el labio. “Sinceramente, estoy aterrada… cada día es peor, pero hoy siento que el miedo puedo dejarlo atrás, cuando quise decirte que demandaras a SM fue porque… ellos nos amenazaron si te decíamos que nosotras no habíamos tomado la decisión de tu salida del grupo.” Jessica le miró dejando entrever sus perlas, estaba confundida por lo que escuchaba. “Estábamos un poco molestas con tu decisión de fundar de todas formas tu marca, pero no nos importó luego porque sabíamos que eras feliz con cumplir tu sueño.” “¿Cómo puedo creer lo que dices? Ni siquiera sé si esto es verdad. ¿Por qué tendría que creer las palabras de alguien como tú?” Preguntó con miedo, todo lo que había creído sobre ellas se estaba destruyendo. “Sooyeon… debes confiar en mí por favor, vuelve a hacerlo.” “¿Confiar? ¿Cómo voy a confiar en alguien como tú?” “¡Porque eres mi familia!-” Respondió sin dejar de temblar, Jessica sintió su pecho arder. “… desde que nos conocimos Jess, has sido parte de mi familia… tú y Tiffany fueron las únicas a las que por poco y casi las presentaba como hermanas a mis padres. ¿Cómo voy a traicionarte si el sentimiento que tengo por ti es inmenso?” Pronunciaba entre lágrimas la mayor. “Aun así… yo no puedo volver al grupo.” Repuso cabizbaja la rubia, Taeyeon se secó sus lágrimas y le miró. “¿Tienes algo más que decir?” La bajita intentó pensar en algo y se mordió el labio, solo quería seguir observándola. “Las chicas te extrañan también…” “Gracias… ¿podrías dejarme sola? Necesito pensar.”

 

 

El viaje hacia casa para la mayor se hizo más pesado, sabía que debía tener respuestas para siete personas más que había dejado en lugar donde vivían. Pero poder decirles que ella no volvería, era lo que le hacía sentir mucho dolor.

 

“Así que no volverá-” Susurra bajando la vista Yoona, Taeyeon asiente apenada y suspira. “… no te sientas mal, hiciste todo lo que pudiste unnie.” Sonríe tristemente, y Taeyeon no puede más que sentir dolor. “Estamos agradecidas de todo el esfuerzo que has puesto unnie.” Seohyun se sienta al lado de la bajita y toma sus manos acariciándolas, la mayor la observa y sus ojos se humedecen. “Ya es tiempo de que descanses, nos toca esforzarnos-” Una mano recae en la cabeza de la mayor y acaricia sus cabellos. Taeyeon observa a Sooyoung quien sonríe cariñosamente sin dejar de acariciarle. “… has sido una gran líder.” “Pero yo no pude traerla de vuelta.” “Estamos unidas y eso es lo más importante ahora.” Inquiere Hyoyeon y la bajita observa atentamente a la muchacha.

 

 

Jessica se deja caer sobre el sofá y observa el televisor, cambia los canales sin estar realmente pendiente de lo que está pasando en cada uno de ellos. Krystal le habla y ni siquiera escucha lo que dice su hermana menor. “Krystal espera un segundo-” Su dedo deja de pulsar el botón para cambiar de canal cuando observa un video. “… ¿Qué es esto?” “Es de lo que te estaba hablando… hoy es el día en que Girls’ Generation estrena su nuevo single en Corea, y está llamando mucho la atención de los canales.” Jessica continuó observando el video y suspiró abatida. “Se supone que yo debía salir allí… Yoona está cantando mis líneas.” “Unnie… ¿no estás molesta o sí?” “Claro que lo estoy… pero no estoy molesta con ellas.” Confiesa y se lleva una mano a sus cabellos. “¿A no?” Pregunta la menor y ella niega. “Taeyeon me dio a entender que era verdad lo que decía… y sé que soy una mala persona al no responderle apropiadamente, pero no es bueno que las nueve seamos vistas… juntas ¿entiendes?-” Jessica sonríe cabizbaja. “… es mejor que nuestra relación se quede así, ellas están bien y yo estoy feliz.”

 

A la mañana siguiente, un golpeteo incesante más un par de timbradas llaman la atención de la adormilada rubia que camina por todo el lugar refunfuñando. “Es que ésta niña tonta no puede salir sin sus llaves. Siempre me despierta. ¿Qué es lo que quie…?” Al abrir la puerta, sus ojos se encuentran con aquella joven que siempre se hizo notar para ella porque decidió tener curiosas coincidencias como su lugar natal, el hospital y escuelas secundarias. “Tiffany” “¿Puedo… pasar?” La rubia abrió más la puerta permitiéndole el acceso a la joven y ésta se adentró en el hogar de Jessica.

“Supongo que vienes a hablarme del nuevo video… lo vi ayer.” Inquiere intentando no parecer interesada, Tiffany la mira atentamente. “¿Qué me ves?” “No sabes lo mucho que te he extrañado Jess… No solo yo, todas las chicas, y Taeyeon, gracias por dejarla que te aclarase todo.” La rubia le miró con aquella gélida mirada que les daba a los desconocidos para que se alejasen de ella. “No me engañes con esa mirada. Sabes bien que conmigo no funciona.” “No me digas entonces esas estupideces.” Tiffany la observa y lentamente asiente bajando la vista. “Yo… sé que debiste sentirte molesta cuando viste el video, esa canción era tan tuya como de nosotras.” Jessica aprieta sus puños sabe que la castaña está en lo correcto. “Pero… quiero que te quedes con esto.” Saca de su bolso una caja y la deposita en la mesa de vidrio frente al sofá. “¿Me estás dando el single de su nueva canción? Bravo Tiffany, creo que te has vuelto más humilde de lo que ya eras.” Sugiere en tono sarcástico y la castaña niega. “No hay una canción allí. Quiero que escuches la segunda y cuando la escuches, me llames-” Jessica la mira fijamente, sin emitir palabra alguna y Tiffany saca de su bolso una hoja con partituras. “… También quiero que leas la letra… te lo ruego.” “¿Algo más que debas decir?” Pregunta Jessica cruzándose de brazos y Tiffany solo baja la vista antes de ponerse en pie y caminar alejándose del campo visual de la rubia.

 

Jessica se queda mirando la caja del single y suspira profundamente, temblorosa lo toma entre sus manos. “¿La segunda canción?” Saca de la caja el disco y se acerca a la radio. “Veamos que tal…” Presiona instantáneamente la segunda canción y sus puños se aprietan cuando escucha el piano. “Esto… es nuevo…”

 

 

Deja caer su cabeza en el manubrio mientras respira agitada. “Soy una completa estúpida.” Sonríe tristemente. Su teléfono comienza a sonar y lo agarra, contestándolo sin observar de quien se trataba. “Tiffany ¿dónde estás? Tenemos ensayo y solo faltas tú para…” “Vine a ver a Jessica, Tae-tae.” Responde callando a la bajita. “¿Te abrió? ¿Q-qué te dijo?” “Yo… le di un single y la partitura de Girls.” “¿Lo hiciste? Pe-pero… ¿por qué lo hiciste?” La castaña se frotó la frente luego de levantar la cabeza y suspiró antes de encender el auto. “Quiero que realmente sepa lo que sentimos por ella.” “¿Y crees que lo hará con esa canción?” La castaña se mordió el labio, sabía que todas estaban tan preocupadas como ella de lo que sucedería si la rubia escuchaba la canción. “¿Y bien?” Volvió a preguntar. “Llegaré a la SM, debo hablar con todas sobre lo que sucedió.” “Está bien.”

 

“¿Qué hicieron qué?” Taeyeon les miró sintiendo que el mundo se le venía encima, las siete jóvenes a su alrededor bajaron la vista, como si estuviesen recibiendo un reto. “Pues lo que escuchaste… queríamos que Sica entendiera como nos sentíamos respecto a ella y…” “¡Pero no está bien!-” Exclamó irritada y se puso en pie, apretó sus puños, se sentía indefensa, débil e incapaz de poder hacer algo. “… al menos no de esa forma.” “Creíamos que sería la manera más silenciosa… así ni siquiera dentro de la empresa podrían saber que lo hicimos.” Comentó Sooyoung. “Taeyeon, realmente queríamos decirle todo eso, no te sientas mal.” Sunny la miró apenada. “¿Creen que esto servirá? ¿En serio?” “Solo debemos esperar a que ella lo entienda.” Yuri agregó y Taeyeon asintió suspirando. “Bien, entonces… ensayemos ¿De acuerdo?”

 

 

“Unnie… ¿Estás bien?” Krystal se encontraba acurrucada a un lado de su hermana mirándole fijamente mientras la mayor observaba al techo. “No logro quitarme esa canción de la mente.” “¿Cuál?” “La que Tiffany me pidió que escuchase… es que… I will always be with you, whenever… you call my name-” Pronunció cantando la canción, Krystal el miró detenidamente. “… ¿Qué es lo que realmente quieren decirme?” “¿Te pidió que la llamases no es así?” La rubia asintió lentamente. “Tengo miedo de que al llamarla algo dentro de mí se rompa.” “¿Qué?” “He creado una coraza y estoy consciente de que se debe a que creí por tanto tiempo que las chicas me habían traicionado pero ahora no quiero ser débil frente a ellas. No puedo mostrarme indefensa.” “Al final siempre fueron parecidas.” “¿De quién estás hablando?” Jessica extrañada y la menor solo le entregó su teléfono. “Solo llámalas.”

 

El teléfono de la americana sonó y lo cogió entre sus manos la bajita. “Tienes una llamada entrante… ¿Debería contestar?” Preguntó al notar que era un número desconocido. La menor entre ambas extendió su brazo sin dejar de mirar una revista. “Oye podrías hacer el esfuerzo de caminar hasta aquí.” Reclamó la mayor y suspiró entregándoselo. “¿Hola?” “Tiffany, soy yo.” “¿Jessica?” Las ocho jóvenes que se encontraban cerca levantaron la vista. “¿Estás sola?” Preguntó la rubia y Tiffany observó a cada chica. Levantó su mano hasta los labios intentando hacerlas quedarse en silencio. “Sí, estoy sola.” Colocó el altavoz y las miró nuevamente. “¿No me estás engañando cierto?” “No, estoy en mi camerino del programa.” Había mentido solo por las chicas que estaban reunidas a su alrededor. “Escuché la canción.” “¿En serio la escuchaste?” Sus ojos se dirigieron a cada una de las siete que le miraban. “Sí y… ¿qué fue lo que trataste de decirme?… yo…” “Sabes bien la respuesta… ¿no te diste cuenta de las letras que estaban un poco más marcadas en la partitura? ¿Las uniste?” “¿Quieres que las una?-” Un hondo suspiro escapó a través del auricular. “… ¿esto es un juego? En serio, ni siquiera antes obedecía lo que me pedías por tanto tiempo.” Reclamó y una sonrisa apareció en el rostro de la castaña. “Te pediré algo… dentro de 5 días estaremos en un karaoke junto a las chicas, si descubres el mensaje, llega allí.” “¿Me mandarás la dirección?” “¿Éste es tu nuevo número?”

Yuri se sentó a un lado de Tiffany y apretó su mano, temblaba. “La he visto en videos pero… escucharla de ésta manera, se siente tan extraño.” “¿Crees que entenderá el mensaje?” Yoona se acercó a ambas jóvenes y se apoyó “Eso espero… solo quiero que lo entienda realmente.”

 

 

Krystal se acercó a Jessica y le miró. “No has llamado a Tyler ¿cierto?” “¿Quién?” Preguntó sin despegar su vista de la partitura. “Unnie… llevas tres días enteros mirando esa canción ¿cuánto más piensas quedarte de esa manera?” “Necesito entender lo que quiso decirme.” La menor se mordió el labio y suspiró saliendo del lugar. “Creo que debería anotarlas por separado, aunque… ¡oye!” Krystal tomó la partitura entre sus manos y la miró. “Las letras que están mucho más marcadas sobresalen con relieves por detrás… márcalas nuevamente poniendo debajo una hoja en blanco y luego rayas esa hoja completa con un lápiz grafito. Aunque falte una letra podrás deducir lo que escribieron.” La rubia alzó una ceja escuchando el método de la menor y se quedó pensando “¿De dónde sacaste tan brillante idea? No creo que mi hermanita sea una chica genio escondida bajo la música.” “Solo lo vi por televisión.” Se encogió de hombros, le entregó la letra y salió de la habitación. “Gracias Krys.” “Solo apúrate con eso, tengo hambre.” “No te prepararé de comer nada, chica floja-” Exclamó, escuchando a la menor refunfuñar. “… entonces, pongámonos manos a la obra.”

 

Jessica se dedicó a pasar las letras en una hoja blanca una por una intentando encontrar el mensaje escrito y su hermana se había rendido a pedirle que hiciese otras cosas, había optado por apoyarla y brindarle todo lo que necesitase, sabía que la mayor si tenía algo metido en la cabeza, no se lo iba a sacar nadie hasta que tuviera una respuesta. “¿Qué hora es Krys?” “Son… las 3:15 de la mañana. Deberías descansar un poco.” Inquirió bostezando la menor antes de apoyar su cabeza en la almohada. “Ya me queda poco.” Respondió sin dejar de marcar con un lápiz grafito la hoja. “Entonces cuando termines ven y acuéstate, tengo frío así que durmamos juntas.” “Ésta niña…” Suspiró y terminó de pasar el grafito, sopló quitando los restos que no necesitaba y observó la hoja. Sonrió viendo su trabajo, las letras se podían ver con claridad y lentamente mientras comenzaba a leer el mensaje, sus ojos se iban llenando de lágrimas.

 

Sica… sabemos que no es la manera correcta de poder comunicarnos. Pero queríamos que todos lo supiesen. Ésta canción la escribimos pensando en ti.

Sabemos cómo te sientes, porque fuimos traicionadas de la misma manera, hemos llorado, gritado, pataleado y solo por el único deseo de volver a tomar tu mano en el escenario y cantar a tu lado.

Cada día que pasa, no dejamos de pensar cómo hubiera, si tú hubieses estado con nosotras.

Es largo y difícil nuestro camino, es dura la lucha que debemos enfrentar pero aunque estemos separadas ahora… nuestros corazones se unieron cuando nos conocimos. Te queremos de vuelta con nosotras… no nos dejes fuera de tu sueño porque nosotras no te hemos dejado fuera del nuestro.

Ven y vuelve a tomar nuestras manos… no la soltaremos, jamás volveremos a soltarla.

 

El rostro de la rubia se encontraba surcado por las lágrimas. La letra que escondía miles de sentimientos, ella las había sentido y no podía dejar de pensar en las jóvenes que habían hecho eso por ella. “Sí… t-también quiero volver a tomar sus manos.” Sollozó sin dejar de apretar la canción contra su pecho.

 

 

La chica más joven del grupo miró al reloj y suspiró, estaba observando constantemente a la puerta. Habían pasado los cinco días desde la llamada de Jessica a Tiffany y se encontraban en el karaoke. “Ella no vendrá.” Comentó cabizbaja. “Seohyun… no te rindas-” Hyoyeon se sentó a su lado y acarició su espalda. “… es verdad que todas tenemos miedo de que las horas pasen y ella finalmente no llegue pero… nuestro grupo siempre se ha basado en que sus letras hablan del amor, la amistad y la esperanza.” “Hyoyeon tiene razón-” Yoona se sentó al otro lado de la menor. “… cada vez que pensamos en esto, nos martirizamos pero si lo vemos con un poco de fe… quizás podamos tener la posibilidad de que…” Un suave toquecito en la puerta llamó su atención. Las ocho jóvenes dentro del lugar se quedaron en silencio. “Taeyeon…” “Abriré la puerta.” La bajita caminó hasta ella, su corazón martilleaba tan fuerte que podía sentir el retumbar en sus oídos. Una vez más golpearon a la puerta y Taeyeon apretó en su mano el pomo, lo giró y abrió la puerta.

“Ho-hola-” La bajita se quedó estática. “… ¿puedo… pasar?” Asintió con su cabeza y la joven entró. Taeyeon cerró la puerta y la chica que había entrado se quitó la enorme bufanda, la gorra y la chaqueta que llevaba puesta. “Sica…” La rubia miró a la que había pronunciado su apodo y le sonrió cálidamente. “¿Cómo estás Yoong?” La joven alta se acercó a ella y dudosa se quedó en pie frente a ella. “¿Puedo… abrazarte?” Preguntó, se mordió el labio, no quería llorar pero estaba derrumbándose por dentro. La rubia dio un paso adelante y rodeó su espalda con sus brazos. “Sujétame con fuerza y no me sueltes.” Pronunció intentando contener sus lágrimas. Las demás miraron la situación y se unieron al abrazo entre lágrimas.

 

“Al fin… entendí la canción.” Inquirió la rubia cuando estuvieron un poco más tranquilas, cada una había llorado de la emoción, estaban las nueve reunidas y sentían que el mundo fuera de esa habitación no existía. “Queríamos decírtelo abiertamente pero la SM no nos ha dejado en mucha libertad desde que dejaste ese mensaje antes del comunicado oficial.” Inquirió Sooyoung y Jessica entendió. “Un gesto como el que hicieron ustedes por mí, vale más que mil palabras.” “Desearíamos que volvieses con nosotras…” “Pero eso no se puede-” Jessica habló y les miró, cada una había tenido la esperanza de que volviera. “… no me miren así, saben que si pudiese volvería con ustedes pero mi camino ahora es diferente. Y estoy feliz, mucho más ahora pero soy feliz con mi nueva vida.” “¿No has pensado en cómo sería tu vida si aún fueras parte de Girls’ Generation?” Preguntó Taeyeon mirándole sorprendida. “Cada minuto. Las cosas que hago, las cosas que digo, siempre pienso en cómo sería si aún estuviera dentro del grupo. Y sé que ambos caminos son duros, solo quiero pedirles algo.” “Lo que sea.” Inquirió la americana mirándole con una sonrisa cariñosa en sus labios. Jessica agradeció mirándoles. “Como decía la canción, su historia sigue así que no miren hacia atrás, olviden las tristezas y todos los pesares del pasado. Hoy estamos juntas y realmente no quiero volver a separarme de ustedes. ¿Podría cantar la canción que escribieron para mí... con ustedes?” Una sonrisa apareció en el rostro de cada una.

 

Finalmente comprendí…

A veces las etapas que debemos enfrentar, llegan en momentos difíciles. Es extraño pensar que en un abrir cerrar de ojos, no están las personas con las compartiste tanto tiempo, es duro pensar que estás solo porque no sabes cómo enfrentar al mundo lo hacías antes cuando tus falencias eran tapadas por quienes podían apoyarte.

Pero por mucho que el pasado esté quebrajado, en el futuro estoy dispuesta a seguir soñando y alcanzar todas mis metas, sé que por mucho que pueda mantener el secreto de que aún sigo en contacto con ellas, alguna vez esto será revelado, pero quizás salga a la luz muchos años después, aun así, ahora solo sé que quiero ser feliz y las personas que alguna vez me dijeron que me querían, aún lo siguen diciendo.

 

 


Bueno, hola !

 

Sé que ésto es diferente a lo que muchos creían, es una historia totalmente ficticia con algunos aspectos de la realidad. La verdad es que he querido dejar un OS así desde hace un largo tiempo porque siento que así puedo extraer lo más profundo de mi ser y a decir verdad por mis declaraciones en mi cuenta de DeviantArt o aquí mismo en la historia, comprenderán que para mi el culpable de todo es la empresa y los directivos en sí. 

Sin más, solo espero hayan disfrutado de ésta lectura y nos leemos en nuevas actualizaciones.

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Comments

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Camilanga
#1
Chapter 1: Lloré te lo juro, uno de mis favoritos sin duda y me alegra saber que hay alguien que piensa como yo. Lamentablemente los idols no tienen una vida misma gracias a su empresa pero es parte del contrato y lastimosamente nadie puede hacer nada. Espero que en el futuro todo o algo se aclare.
Isisnsd #2
Chapter 1: Wow!! Me encanto gracias! Llore!!
DollySweet
#3
Chapter 1: Oh por dios me llegó al corazón! ! u.u
hermoso y triste. .. al menos una perspectiva con la cual estoy más de acuerdo que quiero que sea.
TaenyLove7 #4
Chapter 1: Me encanto mucha gtracias por compartir esto
kimtaeyeon159 #5
Chapter 1: Hermoso~~~~~~