EXO-M tuvo actividades en China que prolongaron su estancia hasta el primer día del 2014 por la tarde, fecha en la que volvieron a Corea. Durante el tiempo que estuvieron para los programas de fin de año su mente no dejaba de pensar en Amber, todo lo llevaba a ella, todo giraba en torno a ella, como hacía desde hace meses en que se dio cuenta de lo que sentía.

Se sentía realmente ansioso por llegar, la punta de sus dedos quemaba de modo que los movía de forma rara mientras que Tao que iba sentado a su lado lo veía de reojo.

—¿Sucede algo Hyung?

—No, nada no te preocupes Tao.

El resto del vuelo intentó dormir y a pesar de cerrar sus ojos, Morfeo se negaba a aceptarlo en la tierra de los sueños. Sus pensamientos estaban muy lejos de ese avión, se encontraban junto a una chica de cabello rubio y corto.

Al llegar al aeropuerto de Incheon prácticamente saltó del avión, el resto de los miembros de M lo veían extrañados pero no le hacían comentario alguno. Declaró su equipaje y mostró el pasaporte siendo el primero en llegar a la camioneta que SM les destinaba. El manager ya los esperaba dentro.

—Iremos a la compañía primero.

Aleluya, alguien allá arriba había escuchado sus plegarias. Llegar al edificio de SM aumentaba sus posibilidades de ver y encontrarse con Amber. Durante el trayecto se mantuvo en silencio y viendo por la ventanilla. Al llegar la voz de Tao lo sacó de su ensoñación.

—Hyung ya llegamos.

Parpadeó varias veces para después descender de la camioneta, a pesar del frío y que ya estaba por oscurecer había fans esperándoles. Sonrió y les saludó con la mano mientras ellas gritaban a modo de respuesta.

Al entrar en la sala de ensayos de EXO los miembros de K los recibieron con abrazos, es cierto que durante la época del debut promocionaron como sub unidades pero después de Wolf se habían acostumbrado a estar juntos, a ser 12. Todos reían y hablaban en voz alta, casi gritando.

El recuerdo de antes de iniciar con las promociones de Wolf golpeó su mente y por un instante la sonrisa desapareció, pero eso era el pasado. Había prometido un nuevo inicio y no dejaría pasar la nueva oportunidad que tenía. Los chicos comenzaron a llamarle de nuevo y todo se volvió risas y alegría hasta que más personas entraron en la sala de ensayos.

—Supimos que M había vuelto. —dijo Victoria sonriendo y entrando con un paquete de comida, seguida por el resto de las chicas de f(x) y ahí estaba ella.

Notó como Amber recorría con la mirada la sala de ensayos hasta que se topaba con la suya y esa corriente eléctrica le invadía por completo y pudo darse cuenta que le sucedía lo mismo al ver su tímida sonrisa aparecer.

Comieron entre bromas y pláticas, se ponían al tanto de lo que había sucedido en la agencia mientras M estuvo fuera, a pesar de que f(x) también había estado en China sus horarios no habían coincidido y entonces Sulli hizo un comentario que lo puso alerta.

—Y la bomba de principios de año es que Henry Oppa se le declaró a Amber Hyung. —dijo riendo e instantes después las expresiones de sorpresa se dejaron escuchar, mientras la mencionada miraba con el ceño fruncido a Sulli, su reacción era de enojo y pudo notar que no había sonrojo o algún tinte de timidez, contrario a lo que ocurría cuando él se acercaba a ella.

Aun así la ira era demasiado grande, Henry se había atrevido a hablar de lo que sentía, se le había adelantado de alguna manera. Apretó fuertemente los palillos de madera que tenía en su mano derecha hasta que la presión terminó por romperlos por la mitad y el sonido hizo eco en la sala después de que todo se había quedado en silencio y cada par de ojos en la habitación se enfocaba en él. Tenía el ceño fruncido y una expresión de molestia era evidente.

Su impulsividad salió a flote ganándole a su raciocinio por lo que se puso de pie rápidamente y tomó a Amber de la mano sacándola de la sala de ensayos ante las miradas atónitas de los chicos, a pesar de eso nadie dijo nada y simplemente observaban. Los chicos sabían que era mejor no molestarlo cuando estaba enojado pues las cosas terminarían peor.

Cerró la puerta detrás de ellos y empezaron a caminar hasta llegar al ascensor, entraron y pulsó el número del último piso. Al llegar las puertas se abrieron y salió todavía con ella de la mano. La sala estaba llena de instrumentos musicales, instrumentos que antes usaron estando juntos.

Soltó la mano de ella y caminó hasta las enormes ventanas, la noche caía sobre Seúl e increíblemente las estrellas podían apreciarse claramente, una noche además de oscura muy fría. Suspiró y eso causó que se empañara el vidrio. Tenía que calmarse antes de hablar con ella.

—¿Qué fue lo que te dijo Henry? —le preguntó todavía viendo por la ventana, a través del reflejo podía verla, ella caminaba hacia donde estaba una guitarra y se sentaba en el sofá para empezar a tocarla. Se giró a verla y sus ojos reflejaban la preocupación y desesperación que era incapaz de expresar con palabras, la miraba fijamente, su mirada hablaba y decía todo: “Por favor, dime que le dijiste que no, dime que lo rechazaste por mí… Dime que soy yo”.

—Super Junior M volvió junto con nosotros a Seúl, Henry se sentó junto a mí en el avión. El día que grabamos para la MBC me dijo que al volver hablaría conmigo y lo hizo durante el vuelo. —Amber suspiró y continúo tocando acordes al azar en la guitarra. —Me dijo que le gustaba desde hacía mucho tiempo y que esperaba que le diera una oportunidad para hacerme feliz, yo iba a contestarle en ese momento pero él me detuvo y me dijo que no le diera una respuesta hasta que llegáramos a Seúl. —Dejó la guitarra y él se sentó a su lado viéndola y escuchando atentamente mientras su corazón latía y golpeaba fuertemente contra su pecho. —Al llegar y antes de que bajáramos del avión le di mi respuesta, le dije que no…—al escuchar esas palabras todo empezó a dar vueltas, sintió que el alma se le salió del cuerpo. —Le dije que solo era mi amigo y nada más… Que yo no puedo verlo de otra forma y que me gusta alguien más…—esas últimas palabras las dijo apenas en un susurro y notó como estaba sonrojada totalmente.

Amber podía ser realmente adorable cuando ni siquiera se lo proponía. Sonrió, sonrió como nunca antes había hecho y tomó su rostro con ambas manos haciéndola verlo fijamente a los ojos. Nuevamente no era necesario decir palabra alguna, sus ojos lo decían todo y se entendían a la perfección.

 

 

*

 

Todo en la agencia se sabía tarde o temprano y su relación no iba a ser la excepción. Estaban siendo realmente cuidadosos, a pesar de que incluso antes de hacerlo oficial ambos daban señales apenas perceptibles de que había algo especial, pocas personas lo notaban—o eso creía— porque entonces no faltaban los fans que comentaban en su Weibo o alguna red social de Amber que los dos se veían bien juntos, que se notaba esa química especial o que él cambiaba totalmente al estar a su lado; no podía negar lo dicho por los fans pero a pesar de que la agencia les había apoyado en mantener la relación se les dio la indicación de manejar todo con discreción hasta que fuera un momento conveniente para revelarlo.

La preparación para el comeback con EXO estaba siendo cada vez más intensa y lo único que estaba en su mente después de haberles dicho el concepto era: EXO-M y EXO-K nuevamente, promociones por separado, China y Corea. Él pasando la mayor parte del tiempo en China, él estando lejos de Corea, él pasando tanto tiempo sin poder verla.

El cansancio era cada vez más notorio en él y en el resto de los miembros. Y es que además del nuevo álbum se les había dado la noticia de que tendrían su primer concierto en solitario, los chicos estaban realmente felices y sin embargo algo empezaba a surgir de nuevo dentro de él… Miedo, ese miedo que antes le hizo actuar de una forma sin pensar, de una forma que casi le había costado terminar con su carrera.

Y la pregunta creció dentro de él, la duda le carcomía y consumía poco a poco: ¿Qué pasaría si decidía…? Pero cada vez que los veía, cada vez que la veía a ella ese miedo se disipaba y se armaba de valor para continuar y sin embargo después volvía a surgir.

 

*

 

Tenía que hablar con alguien de ello, pero estaba seguro que no era algo bueno hacerlo con los miembros. Las actividades del fanmeeting en Japón estaban tan cerca y después de ello el comeback. Tenía que sacarlo o estaba seguro que se iba a volver loco.

Su única opción, la persona que mejor le conocía, la persona que más quería en el mundo, la persona que había estado a su lado desde hacía años mientras ambos luchaban por su sueño. Ella.

Reunirse en la sala de instrumentos de la compañía se había vuelto algo usual cuando querían estar a solas y no podían salir a algún lugar como cualquier otra pareja normal haría. Si no fueran idols podrían estar juntos sin problemas,  si no fueran idols… No hubieran terminado juntos.

Mientras pensaba en cómo darle la noticia veía el suelo fijamente y jugaba con sus manos nerviosamente. Tanto EXO como f(x) estaban en preparación para sus respectivos regresos al escenario, y eso provocaba que no se pudieran ver tanto como antes aun siendo de la misma compañía. Recientemente había creado una cuenta de Instagram y se vio tentado a seguirla y sin embargo ella lo hizo primero pero no él no hizo lo mismo, estaba seguro que sería algo de lo que Amber le reclamaría al verlo. Ya podía escucharla: “Wu YiFan, ¿Cómo es posible que no sigas a tu propia novia en Instagram? O ¿Quieres protegerme?”

No lo negaba, desde el inicio siempre intentó protegerla, sabía que el grupo poseía una gran cantidad de sasaengs por lo que era peligroso para ella y sin embargo Amber siempre le decía que estaba bien, que mientras estuvieran juntos todo iría bien, esperaba que después de escucharlo quisiera mantener esa promesa.

Estaba tan inmerso pensando que ni siquiera se dio cuenta que ella entró y estaba parada justo frente a él.

—Hace días que no me ves y ni siquiera reaccionas, ¿qué clase de novio eres? —le dijo riendo mientras le quitaba la gorra que llevaba puesta y se la ponía ella para luego sentarse a su lado. Sonreía pero esa sonrisa desapareció en cuanto vio su expresión. —YiFan… ¿Pasa algo?

—Tengo algo que decirte…

Amber se acercó a la orilla del sofá y notó como su espalda se ponía recta a causa de la tensión.

—Vamos esas son las típicas palabras que alguien dice cuándo va a terminar al otro…—ella intentaba sonreír. —Si eso quieres no vengas con rodeos ¿de acuerdo?

—No quiero terminar… ¿Cómo puedes decir eso? —la opresión en su pecho aumentaba y le costaba respirar.

—Entonces dime qué sucede porque me estás asustando, algo debe pasar para que ni siquiera puedas seguir a tu chica en Instagram y no vengas con esas cosas de las sasaengs de nuevo. —Tan segura, tan valiente, tan ella.

—Es algo difícil, y solo puedo decírtelo a ti.

—¿Es algo malo? —asintió. —Bien, suéltalo. Rápido y sin anestesia. —intentó sonreír pero no lo consiguió.

—Amber…—la tomó de la mano y la miró fijamente a los ojos, nuevamente no había necesidad de palabras, sus miradas decían todo y sin embargo era necesario decirlo en palabras, pues los ojos de ella se negaban a creer. —Amber… Te quiero y lo sabes. —los ojos de ella empezaban a enrojecerse y sentía como los suyos comenzaban a arder. —Amber…

Ella apretó su mano y se dio cuenta que detenía sus lágrimas. Comenzó a contarle cada detalle, cómo todo había comenzado desde la preparación para el regreso con Wolf, su segunda oportunidad y su decisión de no desperdiciarla y darse a sí mismo otra oportunidad e intentar hacerlo mejor, el miedo que había comenzado a surgir dentro de él, el cansancio que era cada vez mayor, las razones por las que había decidido hacerlo de esa forma.

Ella apretó su mano nuevamente y continuaba tragando sus lágrimas y se mantenía en silencio escuchando hasta que terminó de hablar. Ella apretó su mano y después lo abrazó, lo abrazó tan fuerte y no quería soltarla, no quería dejarla ir y ella tampoco quería dejarle ir.

Se separaron y ella nuevamente apretó su mano. Le besó en los labios, apenas un roce y se puso de pie. No dijo palabra alguna, simplemente salió de la habitación dejándolo solo. Lloró, lloró en silencio mientras algo dentro de su pecho dolía y le hacía sentir que no podía respirar, que el oxígeno no era suficiente.

Él deseaba irse pero no quería dejarla y sin embargo en ese momento tenía que hacerlo de esa manera, él deseaba irse y ella le dejó hacerlo.

 

 

*

 

Como esperaba después de haber hablado con ella, no solo dejó de seguirle en Instagram sino que además le evitaba a toda costa dentro de la agencia y también fuera de ella. Los chicos creían que habían peleado y prefería que pensaran eso. No terminaron, porque ninguno de los dos hablo de hacerlo. Era como si estuvieran en una especie de pausa o stand by y lo que más le dolía es que no sabía cuánto iba a durar.

El comeback con EXO-M estaba yendo viento en popa, pero las cosas estallaron y todo salió de control. La demanda se hizo pública y con ello el escándalo surgió. Un sinfín de rumores, de declaraciones de supuestas fuentes veraces, de comentarios hirientes por parte de fans y por supuesto, de anti fans.

Los chicos estaban molestos, no era algo que les pudiera reclamar, entendía que reaccionaran de esa forma pero tampoco podía negar que no le afectaba leer o escuchar ese tipo de declaraciones. Y sin embargo ya era demasiado tarde para volver hacia atrás las cosas, estaban sobre marcha y no se detendrían hasta que todo el proceso terminara.

No quería herirlos, ¿cómo alguien va querer herir a sus amigos, su familia? No, eso no. Y sin embargo en el momento consideró que era la única forma de hacer las cosas, el miedo lo superó y cegó para actuar.

 

 

*

 

Los chicos continuaban con la gira por Asia y teniendo mucho éxito. El proceso legal continuaba y parecía que la fase pre liminar continuaría por unos meses más, mientras tanto había conseguido hablar con algunos de ellos. Las cosas se habían calmado un poco, y aunque continuaban con cierto enojo por lo ocurrido entendía que era también a causa de la tristeza y esperaba que con el tiempo las cosas mejoraran entre ellos.

No la había visto durante todos esos meses, mensajes ocasionales a través de Weibo o llamadas de escasos segundos a causa de los ensayos y prácticas de ella. Supo que a f(x) le estaba yendo bastante bien y que las chicas estaban felices con ello. Durante ese tiempo no volvieron a tocar el tema de su relación, y ese stand by continuaba prologándose cada vez más.

Guangzhou era donde estaba residiendo en ese momento, junto a su familia, junto a su madre. Había momentos en los que extrañaba Seúl, y cuando pensaba en ello la tristeza llegaba.

Toques en la puerta de su habitación lo hicieron levantarse de la cama. Los toques eran cada vez más insistentes.

—¡Ya voy mamá!

Pero eso no detuvo el golpeteo que fue aumentando hasta que finalmente abrió la puerta de golpe con una expresión de molestia que desapareció para dar lugar a una llena de sorpresa al ver a quien estaba frente a él.

—¿Crees que esa es la forma para recibir a tu novia?

La risa de Amber lo hizo volver a la realidad; Amber estaba ahí frente a él, frente a la puerta de su habitación, había viajado hasta Guangzhou a verlo…

La abrazó fuertemente y aspiró su aroma, meses tantos meses sin tenerla cerca, sin poder abrazarla, sin poder besarla y tocarla, meses en los que fue preso de una angustia enorme al pensar qué sucedería entre ellos.

Era un nuevo comienzo, y definitivamente todo lo que viniera a partir de ello lo tomaría y enfrentaría, no volvería a dejar que el miedo le venciera.

Y es que para Kris ella es…