Tan pronto como salimos de la habitación, me solté de la mano de Lu Han y empecé a agitarme los cabellos con fastidio. Sabía que era realmente una mala idea, pero tampoco quiero echarle la culpa a Lu Han. Cuando me solté la cabeza para mirarlo, él seguía mirando a la nada. Probablemente todavía pensaba en las palabras de la clarividente. "¿Lu Han?" le di un golpecito en el hombro a la ligera. "Uh... ¿Sí?" me miró pero aún tenía esa expresión desconcertada en su rostro. "¿Estás bien, cariño?" le pregunté. "Sí. Solo me preguntaba qué predijo la señora." me encaró y de pronto se apoderó de mis dos manos. "¿Se Hun?", "¿Sí?" respondí mirándole a sus ojos de color marrón oscuro. "Si algo va mal, asegúrate de informármelo, ¿de acuerdo? Yo no quiero que tengas secretos conmigo. Por favor, dímelo todo. Me refiero a todo." me apretó la mano con fuerza esperando una afirmación mía. "S-seguro..." conseguí mentir nuevamente en frente de él. Sonrió y empezó a jalarme, "Aliméntame. Mi estómago está gruñendo." me reí al verle cambiar su estado de ánimo tan rápido. Hace apenas un momento estaba este pequeño parloteando de no mantener-un-secreto-entre-nosotros y con solo un abrir y cerrar de ojos se transformó en este estoy-hambriento-y-me-importa-una-mierda todo. Pues bien, me encogí de hombros, restándole importancia a toda la cosita esa de adivinación y dejé a Lu Han liderar el camino.

De alguna manera terminamos en frente de un restaurante chino que Lu Han encontró sin querer. "Quiero comer aquí." indicó mientras hacía pucheros adorablemente. "Está bien, entonces, cualquiera cosa que mi princesa desee", entramos juntos al restaurante y encontramos el camino hacia una mesa libre. Un camarero se acercó a nosotros y tomó nuestras órdenes. Lu Han volvió a la normalidad una vez más, se estaba riendo de nuestra conversación que no hubo manera de que notáramos que había alguien de pie delante de la mesa.

"¿Se Hun?", preguntó la voz. Lu Han y yo levantamos nuestras cabezas para ver quién era y para mi gran sorpresa, era la persona que nunca esperaba encontrar en este momento. "Oh—Eunjung noona" rápidamente me puse de pie para saludar a mi noona. Supongo que no la he visto después de la preparatoria que fue hace 6 años. Ella se rió y tocó mi espalda a la ligera, "Aigoo, mira a este muchacho, ¡estás tan alto!", exclamó mientras se ponía de puntillas examinando cuánto había crecido. "Bueno, en realidad no. ¡Tal vez es solo porque eres la que dejó de crecer!" hizo un puchero ante mi declaración cuando de repente oí una garganta aclararse ruidosamente viniendo de Lu Han por la conmoción. "Oh noona, quiero que conoz—", "Soy Lu Han dicho sea de paso. El novio de Se Hun." Lu Han interrumpió de tal manera que al hablar hizo mucho hincapié en la palabra novio. Él estaba muy molesto por su tono, pero mantuvo la compostura para extender una mano a Eunjung noona. "Ohhhhh... Lu Han. Adorable. Encantada de conocerte." Noona gustosamente le estrechó la mano con una amplia sonrisa estampada en el rostro. "¿A dónde te diriges?" le pregunté a noona, "Estaba a punto de almorzar aquí, pero luego te vi llegando con alguien, así que me pensé un poco antes de acercarme a ti.", dijo. "Ohhhh... bueno, entonces, ¿por qué no te sientas con nosotros? No estás con alguien, ¿o me equivoco?", le pregunté educadamente. "¡Me encantaría!" ella aplaudió con emoción mientras se acercaba a mi lado derecho haciendo que Lu Han rodara sus ojos y gruñera ante la escena.

[POV Lu Han]

¡Esa zorra no deja de coquetear con mi Se Hun! Quiero decir, ¡¿no oyó la palabra NOVIO demasiado enfatizada?! Casi había pasado como una hora y Se Hun ni siquiera le importó echar un vistazo rápido para darse cuenta lo mucho que estaba disgustado a causa de ellos. Quizá debería haber pintado un ‘Novio aquí’ como letrero en mi frente para que ella pudiera dignarse a soltar su fuerte apretón sobre el brazo de mi amado. Y lo más irritante es, ¡que Se Hun parecía disfrutarlo jodidamente! Quiero decir, ¡¿hola?! ¿No ves que estoy aquí? Parecía que ellos se habían olvidado por completo de mí. Ellos han estado totalmente risueños y coquetos y cariñosos y ohhhh no quiero hablar sobre ello. ¡Ella incluso alimenta a Se Hun! ¡¿Cómo se atreve ella?! Yo solo podría agarrar el cabello de esa chica y sacarla del restaurante o simplemente tomar un poco de mi copa y solo cambiar mi atención a otra cosa, así que opté por esta última. Cuando miré a mi derecha evitando en lo posible la escena más desagradable frente a mí, vi un rostro familiar al otro lado del pasillo. Al fijarme más, me di cuenta de que era uno de mis compañeros de la universidad, Kris; estaba con alguien que prácticamente se comía su rostro, lamiéndole los labios con aquel beso que estaban compartiendo. Me puse de pie, sin importar de excusarme con Se Hun y su noona, y caminé a la pareja que se besaba. Por mucho que yo no quería molestarlos, Kris de repente se apartó del chico (Biiieeeeeen, me acabo de dar cuenta que era un él al que estaba besando) tan pronto como me vio. Rápidamente me dio un abrazo y me invitó a sentarme con ellos. "¡Es bueno verte de nuevo! ¿Cómo has estado?", exclamó mientras se sentaba al lado del chico. "¡He estado bien! ¡Tú! ¡¿Cómo has estado?! ¡No te he visto después de la graduación!" Estaba muy feliz de ver nuevamente a un viejo amigo, por no mencionar que se me olvidó preguntar quién era el chico a su lado. Por suerte se dio cuenta y empezó por presentarlo. "Él es mi bebé panda, Tao. Hemos estado juntos desde que terminó la graduación." Él sonrió mientras colocaba su brazo alrededor del hombro de Tao. Sonreí alegremente, "Oh, eso es genial. Por lo menos ya no eres el señor ‘Para siempre solo’." Los tres reímos. "Entonces, ¿sigues con Se Hun?", preguntó Kris. Dejé escapar un profundo suspiro y rodé mis ojos, "Desafortunadamente, sí." Kris frunció el ceño ante mi respuesta, "¿Por qué el suspiro? ¿Sucede algo?". "Mira cruzando el pasillo, está con su noona zorra." crucé los brazos mientras tomaba un rápido vistazo a ellos. "Ughhhh. Asqueroso." chilló Tao. "Lo sé." negué con la cabeza lentamente, de acuerdo con lo que había dicho Tao. "Entonces, ¿por qué lo dejaste coquetear con la noona? Es tuyo ¿no?", preguntó Kris después de tomar un sorbo de su vino. "Solo déjalo ser... Con seguridad, él se arrepentirá más tarde." Una sonrisa se formó en mis labios.

Pasé el resto del tiempo con la pareja TaoRis hasta que Se Hun llegó sin señal alguna de la zorra, diciéndome que ya era hora de irnos. Me despedí de mi amigo, y también de mi nuevo amigo. Cada uno de ellos me dio un abrazo y Kris tuvo una breve conversación con Se Hun antes de que nos fuéramos.

"¿Por qué te fuiste de repente? Sabes, fue algo bastante grosero hacia Eunjung noona." Se Hun dijo mientras llevaba el cinturón de seguridad y luego encendía el motor, poniéndonos en marcha. "Bien, lo siento." dije sarcásticamente mientras miraba por la ventana. "¿Qué te pasa?", preguntó. Oh dios Se Hun, deja de hacerte el tonto. De nuevo estás siendo ingenuo. ¡Estoy celoso, estúpido anormal! me quedé en silencio, sin darle una pista de lo que estaba sintiendo. "¿Lu Han?" él estaba dirigiendo el volante, pero se las arregló para agarrarme de la barbilla y me hizo mirarle a la cara, "¿Hay algún problema?" seguí sin darle alguna respuesta y solo lo miré. Al cabo de unos segundos le hice soltar mi cabeza y miré de nuevo a otro parte. Quedamos en silencio por el resto del trayecto hasta que llegamos a la casa de descanso. Fui el primero en bajar y  me dirigí rápidamente al interior, evitando iniciar una conversación con Se Hun.

[POV Se Hun]

¿Qué pasa con él? Ni siquiera esperó a que yo bajara, solo se apresuró en ir al interior, dejándome allí sin comprender. ¿Hice algo mal? simplemente no entiendo por qué es que está tan irritado desde que salimos del restaurante. Corrí al interior de la casa para atraparlo y cuando lo hice sentí un par de labios que tocaban los míos. Era frío y sin emociones, no era el tipo de besos que solíamos compartir. Ninguno de los dos cerró los ojos mientras nos besábamos lo que prácticamente señaló que no era un beso de amor. Tan pronto como él se alejó, me miró fríamente, "Tú parecías a gusto estar todo sentimental y coqueto con tu noona, ¿no es así?", dijo. "¿Q-qué?" tartamudeé. Luego me agarró del cuello y una sonrisa se ​​formó en sus labios. Oh no. aquí viene otra vez el Lulu malo. "¿Has olvidado a quién perteneces?", susurró. Con eso, me soltó y entró en la habitación. Golpeé la puerta con la esperanza de que él quisiera abrirla, pero lo único que obtuve fue el silencio en respuesta. ¿Incluso cómo voy a resolver el problema si en primer lugar no sé cuál es el problema? Al diablo, realmente me trató con frialdad hace unos momentos. "¡Lu Han, abre la puerta! ¿Cómo se supone que debemos arreglar esto si no cooperas conmigo?" grité tras la puerta. "¡Lu Han! ¡Lu Han!" golpeé más fuerte. "¡Cómo!", gritó de nuevo. "Hablemos de esto, dime cuál es el problema", "¡Eres realmente un tonto, lo sabes!", respondió. "¡Ve y pregúntale a tu mamá! ¡Ella podría saber cuál es nuestro problema!". "¿Qué? ¡¿Que vaya a preguntarle a mi mamá?!", susurré. "¿Qué quieres decir?" le grité. "¡Eres idiota! ¡No me hables!", respondió. Maldije entre dientes mientras sacaba mi teléfono de mi bolsillo. Marqué un número determinado y afortunadamente ella me respondió después de la cuarta timbrada. "Umm... Hola mamá, soy yo Se Hun."