Bucker-Uppers

Crazy in Love
 

Viste eso? ―le digo a yuri cuando termina de despedirse de

―¿ nuestros amigos.

―¿Ver qué? ―pregunta aunque prácticamente responde mi

pregunta.

―¡jessica me enseñó el dedo!

Me sonríe yuri como le sonrío a Sandy a veces.

―Oh, tiffany, claro que no lo hizo.

―¡Yeah! ¡Lo hizo! ―Pero ya me puedo imaginar que yuri no me va a creer, aunque tuviera en mis manos las cintas de seguridad del centro comercial.

―Sólo estás molesta porque arruinaste tu suéter y…

―¡No arruiné mi suéter! ―grito. La gente en otras mesas se gira a vernos. Hacia nosotras―. No es que eso me importe, odio este suéter. ¡Pero esa fue jessica, también!

yuri da un suspiro digno para Sigh Fry.

―Admítelo, tiffany. Estás celosa de jessica.

Duh, Plain young está de acuerdo.

¿Yo? ¿Celosa de qué, de la bruja flaca doble-cara? Desafía t.y.

Mi suéter empapado se aferra a mí, la combinación del jarabe de la Coca-Cola ligth y la pelusa del suéter me pica.

―Me voy a casa ―le digo agarrando mi abrigo y voy hacia la salida.

―Pero ¿qué pasa con el partido? ―llama yuri detrás de mí.

―¡Diles que van a tener que jugar sin tiffany young! ―grito.

Por el tiempo me lanzo al camino rápidamente, Fred huele a naftalina oxidada. La ira que siento se ha transformado por lo que leí en mi clase de psicología en tres o cuatro etapas de la negación, la ira, la tristeza, y se me olvidaron las demás, porque me quedo en la tristeza profunda. Realmente pensé que a Jackson le gustaba. Estaba así de segura y jessica era historia, una fea línea del pasado para borrar. Pero hoy se fue, abrazando a jessica y a mí casi no me miró.

Espero que se ahogue con sus pretzels.

Mis padres me están esperando cuando regreso, mi madre aparece caminando con su nariz de duendecillo hacía arriba, sé que es porque huelo a perro lanudo y por eso nunca me dejó tener una mascota cuando era una niña.

Ella da un paso atrás.

―¡Tu suéter color marrón! ¿Qué…? ¿Cómo…? Me encantaba ese suéter. tiffany,

¿Qué fue lo que sucedió?

―Coca-Cola Light ―respondo.

―Pero... ¿cómo...?

Todo lo que quiero hacer es tomar una ducha caliente. Y no salir nunca.

―Es una larga historia y lo estoy superando. Sólo me quiero acostar temprano. ―Paso por de delante de ellos.

―¿Ahora? Esta noche ―pregunta papá―. ¿No hay un partido esta noche?

Me sorprende que esté suficientemente informado para saber esto, pero asiento. Me parece que desaparecieron todas mis reservas de energía para poder mover la cabeza hacia arriba y hacia abajo.

Mamá se hace cargo de los interrogatorios.

―Entonces, ¿por qué te vas a quedar en casa?

Estoy pensando que no puedo ganar. Se vuelven locos cuando llego tarde, y también locos cuando llego temprano. Padres.

―¿Tengo deberes? ―Eso no es totalmente una mentira. También nada tiene que ver con que me quede en casa.

Empiezo a caminar de nuevo, pero ellos no han terminado.

―tiffany ―dice mamá sin mirarme―, tenemos que hablar.

Estoy teniendo la clara sensación de que hay más en juego aquí que mi suéter manchado y estar temprano en casa un sábado por la noche. No sé lo que viene, pero ha sido uno de esos días en que creí que nada sucedería. Me doy cuenta de que tengo que prepararme, rápidamente. Pero no hay nada en mí, sino simplemente pelusa mojada. Puede que sea la hija de la reina de las BuckervUppers, pero no soy ninguna princesa. Ella no me pasó un ADN en particular. Aguardo.

―El teléfono ha estado sonando todo el día ―dice mamá.

Entonces lo entiendo. Las llamadas no han parado porque yo no estuviera en casa.

Estúpida que era al pensar que desaparecerían y esperar a que todo este rumor hubiera muerto como mi relación con taeyeon kim.

―¿Cómo? ―digo débilmente.

―Salón ―ordena mi padre un hombre de pocas palabras, excepto cuando está en la cancha, que es lo que esto está empezando a sentirse―. Ahora.

Los tres nos sentamos juntos en la sala de estar y trato de recordar la última vez que nos reunimos de esta manera. Creo que fue justo después de que Alicia y yo hicimos llamadas de broma a nuestro vecinos acusándoles de robo, sólo que todo el mundo reconoce mi voz, y se lo dijeron a mi madre.

Papá comienza la acusación.

―Tu madre dice que has estado recibiendo un gran número de llamadas telefónicas, todas ellos de chicos y chicas. ¿Qué sabes tú acerca de esto, tiffany?

No sé qué decir, así que repito.

―¿Un gran número de llamadas telefónicas? ¿De chicos y chicas?

―Un gran número de llamadas ―confirma mamá―. Todas ellas de chicos y chicas.

Asiento, teniendo esta información para ganar tiempo. Podría hacer algo. Estoy bastante segura de que podría conseguir que papá crea en mí. Es un experimento científico. Es nuestra asignación en nuestras comunicaciones.

―¿Y bien? ―Mi padre puede decir más con esa frase que la mayoría de la gente puede en todo un discurso.

Mamá está sentada en el borde de la silla.

―Algo está mal, muy mal aquí. Puedo sentirlo. ¿Hay algo que tenemos que saber, tiffany? ¿Por qué te llaman todos estas personas?

Esto es más que vergonzoso. ¿Cómo les dices a tus padres que todos los chicos y chicas del colegio están llamándome para tener relaciones uales? Probablemente. O por lo menos alguna forma de contacto.

Y si les digo, ¿Cómo convencerlos de que la única razón que tienen estos chicos es debido a una miserable salida de cuatro minutos?

Papá se acerca y se sienta a mi lado en el sofá.

―tiffany, ¿Qué es? Nos lo puedes decir. ―Su voz es tranquila. Me dan ganas de confesar, pero no hay nada que confesar. Él debería ser un sacerdote.

―Yo no hice nada. ―Pero no puedo mirarlos, por lo que dudo que sea creíble. Miro mis manos mientras mis dedos nerviosamente recogen pelusa marrón de mi suéter―. Lo juro. No he hecho nada malo. Simplemente creen que lo hice. O lo haré. O quisiera.

―¿Estás hablando sobre una calumnia, tiffany? ¿Alguien está propagando rumores sobre ti con estas personas? ―Mi padre se ha convertido en Thomas Ettermeyer, Licenciado en Derecho. Creo que huele a una demanda―. Quiero nombres.

Aunque quisiera proporcionar esta información, no puedo. Le creí a taeyeon cuando dijo que no había dicho nada a nadie de nuestros cuatro minutos juntos.

Por otra parte, le creí cuando me dijo que jessica y élla habían terminado.

―No tengo nombres, papá ―alegué.

Miro su rostro colapsar. Por un instante, piensa que podía solucionar todo esto con una sólida demanda por difamación.

Pero me parece que la realidad es que se está hundiendo ante la posibilidad de que incluso una acción contra mi clase no ayudaría en nada.

Estoy empezando a sentir lástima por él.

―¿Qué podemos hacer entonces, cariño? Esas personas no pueden simplemente decir cosas como esas, ¿es posible? ¿Puedes decírselo al director? Nosotros no podemos dejar que arruinen así tu reputación. ―Mamá parece que está a punto de llorar ya que su máscara de pestañas es una plasta.

Miro a mamá a papá y hacía atrás. Y sé que depende de mí. Este es mi problema.

―No se preocupen por esto, ¿de acuerdo? ―les digo y mi voz se eleva una octava―. Yo no hice nada y todo lo que tengo que hacer ahora es decirles a los chicos y chicas toda la verdad. Puede ser que me tome un par de días. Pero todo va a estar de nuevo bien. La verdad saldrá a la luz. ―Atormento a mi cerebro para que me dé más clichés―. Esto también pasará al olvido. ―Comprendo que estoy tomando decisiones cuando mis padres están tratando de aconsejarme en materia de la vida y el amor. Me siento como si estuvieran lanzándoles cacahuetes a las palomas hambrientas. Pero mis padres son los que se están muriendo de hambre y están tomando la paloma para alimentarse. Están comprándome esto porque lo necesitan Los canales tallados en sus caras nuevamente son líneas.

―¿En serio? ―pregunta mamá.

Asiento como si fuera positivo.

―Cosas como éstas sucede todo el tiempo. No a mí ―agrego rápidamente―. Probablemente ya se terminó. Pero es mejor que me llamen aquí el fin de semana, por las dudas. De todos modos, no hay nada de qué preocuparse.

―No sé, tiffany ―dice papá. Pero él se inclina hacia atrás y parece ser que respira con normalidad otra vez―. Podría hacer algunas llamadas, presentar una queja…

Consigo una sonrisa, una sonrisa real.

―Eso empeoraría las cosas, papá. Déjame manejarlo a mi modo, ¿de acuerdo? Gracias por la preocupación. En serio, te lo agradezco. Fue bueno hablar las cosas y todo eso. Y serás el primero en saber si necesito un abogado. Pero esto va a estar bien.

Me levanto del sofá y me dirijo a las escaleras. Ellos no me detienen. Mis padres deben creerme. Es cierto que me habían creído porque ellos lo esperaban, lo necesitaban. Mis padres tienen esa necesidad irresistible de creer que todo sale a pedir de boca (sus palabras, no las mías) con sus hijos. Yo no me lo creo. Ojalá que sí, pero no es así. Y sin embargo, tengo sólo una cosa increíble.

Me he resistido hasta ahora. tiffany young pudo haber heredado el gen Bucker-Uppers después de todo.

 

 

Bucker-Uppers: Animadoras.

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Comments

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yoonalim__ #1
Chapter 2: Hasta ahora, todavía no entiendo la historia.
yoonalim__ #2
Chapter 1: No comprendo
yoonalim__ #3
esta historia parece interesante
Dianasnsd
#4
Esta muy buena la historia, me dejaste picada, quiero saber cómo acaba.