Se suponía que aquella noche en la playa, era su última vez juntas. Taeyeon lo sintió cuando dejo a Tiffany a la mañana siguiente. El largo adiós, que era íntimo pero que cuidadosamente, se mantuvo detrás de las líneas de la amistad.
Supuso que tanto Tiffany, como ella, quisieran romper su contacto, pero para su sorpresa, Tiffany siguió enviándole mensajes.
Cada día.
Y cada vez que Taeyeon leía esos mensajes, esa cosa física llamada amor, se prendía en su estómago.

No sabía qué pensar. Ella no sabía que un simple "Hola, ¿cómo estás?" podría hacerla sentir, tan increíblemente confundida.
Si Tiffany no quería su amor, entonces ¿qué estaba buscando? ¿Era para burlarse, o es que simplemente no sabía cómo mantenerse alejado de ella? Taeyeon no entendía, y tampoco estaba segura de querer hacerlo. Por lo regular, ignoraba los mensajes y sabía que Tiffany lo entendía.
Pero a veces, también respondía. Y todo,  parecía ser como antes. 
Aun estando tan confundida, la torpeza que esperaba nunca llegó. Sin embargo, Taeyeon optó por no acercarse demasiado a Tiffany. Si iba a terminar, también quería que fuera rápido. Con el menor dolor posible.

Lo estaba haciéndolo bien, siguiendo adelante e ignorando todo, hasta el día  que Tiffany la llamó. Era la primera vez que hablaban desde su "última" noche ... y Taeyeon estaba aterrorizada cuando contestó.
"¿Hola?"
"Hola, soy Tiffany." Lo sé, ¿Pero por qué me llamas?
"Oh, hola."
El silencio. ¿Eso era todo?
"...¿Hola?"
"Sí, lo siento." Tiffany se rio de sí misma. "Sólo estaba, um, llamando para... decir que Sooyoung me invitó a su casa este viernes." ¿Y eso qué significa?
"¿Qué?"
"Sí, uhm, quiero decir, ella quiere que tú y yo, vayamos a su casa."
"¿Por qué?" Taeyeon no le había contado a Sooyoung, lo que le pasaba. Y no estaba planeando hacerlo. Cuantos menos lo dijera, mejor.
"No lo sé." Se sintió triste al oír el tono de Tiffany, como... si fuera un compañero que no es del agrado de una persona, pero con el que tienes que trabajar. “Al parecer, una amiga suya viene y quiere presentárnosla.”
"¿Quién es?"
“No lo sé, una chica de la ciudad.”
"De acuerdo."
Silencio de nuevo.
"Entonces, ¿vas a ir?" La pregunta de Tiffany interrumpió el breve momento.
"Uh ... sí, supongo que sí" dijo Taeyeon. Intento ser poco agradable con Tiffany, sin ser una completa idiota.
"Bien."
Silencio.
“Entonces ... te veo luego.”
"Sí, adiós."

Cuando terminó la llamada, Taeyeon se tiro a llorar, porque nunca había tratado a Tiffany de otra manera, que no fuera como una princesa.
Y hablarle, como si no le importara, le rompía el corazón.
Tiffany merecía más.

Respiraciones profundas.
Era casi la medianoche y la velada había estado bien.
Casi bien.
De hecho, en casi todos los sentidos, fue una gran noche. Incluso, a veces  podía mirar a Tiffany y olvidar... que su tiempo juntas tenía que terminar. Tenía que recordarse a si misma, en no reírse demasiado de sus bromas. No sentarse demasiada cerca de ella. O no hablar con ella, más que de costumbre. 
Y descubrió, que era una de las cosas más difíciles que había tenido que hacer.

Estaban sentadas en el suelo de la habitación de Sooyoung, bebiendo sus refrescos en vasos de vino. Sooyoung siempre dijo, que beber en copas de vino, la hacía sentirse como una adulta sin importar qué bebía.
Taeyeon solía reír siempre que pensaba en ello.
Una música extraña, oscura y pesada tocaba en la habitación apenas iluminada. Taeyeon no tenía memoria de que Sooyoung gustara de ese tipo de música, pero de nuevo, pudo ver que su nueva amiga, Hyoyeon, la disfrutaba muchísimo...
Tiffany, por otro lado, parecía completamente asustada.
Y Taeyeon tenía que admitir que estaba un poco incómoda. La casa de Sooyoung estaba en el bosque, en medio de la nada. El hombre en la voz rasposa del CD, se mezcló con las sombras de los árboles afuera, y el olor del incienso, hizo una mezcla bastante hostil.

"Wow, hace calor aquí." Todos los ojos se volvieron hacia Hyoyeon.
Un poco
Taeyeon vio la forma en cómo Sooyoung, miraba a la niña mayor.
"Vamos afuera."
Tiffany parecía que estaba a punto de entrar en pánico ante la sugerencia.
“¿En serio?¿Qui-quieren salir?” 
"Si,¿ Por qué no?"
“Quiero decir, es tan ... tan ... tan tarde.” Tiffany miró el reloj de la pared. Su expresión aterrorizada hizo que Taeyeon quisiera tomarla en sus brazos y protegerla de todas las cosas de las que no necesitaba protegerse. Las sombras. La oscuridad.
Pero eligió protegerse a sí misma.
Mientras Sooyoung, parecía muy dispuesta a salir.
“Sí, pero mira la niebla.”
Todas se pusieron de rodillas y miraron por la ventana. Luna llena y niebla sobre un prado - parecía casi surrealista.
"Wow ..."
"Leíste mis pensamientos, ¡Así que vamos!"
Hyoyeon y Sooyoung corrieron hacia la puerta.
Taeyeon se levantó en silencio y vio a Tiffany aun en el suelo.  Pero al final, la niña se levantó a regañadientes para seguirlas afuera... 
Y Taeyeon se prohibió a si misma,  extenderle la mano y ayudarla a levantarse.

Tan pronto como salieron por la puerta, Taeyeon se enfrentó a su primer gran problema en su plan, para seguir adelante: las ranas.
Ranas, por todas partes.
Ella termino gritando.
Mientras Sooyoung y Tiffany se rieron, y Hyoyeon parecía confundida.
“Odia las ranas.” Sooyoung fue rápida y respondió primero.
"¡No podemos caminar, con todas esa cosas en el suelo!, ¡Lo siento, pero no yo puedo hacerlo!"
"¿Por qué no?" Tiffany la miró divertida.
"Es desagradable."
Tiffany se acercó a ella y le dio la espalda.
“Entonces sube.”
"¿Qué?"
Hyoyeon y Sooyoung las miraron atentamente.
“¡Sube a mi espalda!”
"¿Para qué?"
“¿Así no tendrás que caminar junto a las ranas?”
Algo en el interior de Taeyeon hizo tictac y explotó. Tenía que pensar en una razón para no  hacerlo...
"Soy demasiado pesada." Ella misma se rio torpemente y quiso golpearse en seguida.
“No seas idiota, cortita.”
"¡Oye!" Taeyeon la golpeó en el brazo, antes de darse cuenta de lo que estaba haciendo.
Ser ... normal ... con Tiffany. Justo lo que se suponía, no debía hacer. Maldijo a Sooyoung por invitarlas a ambas, aquella noche.
“¡Vamos, salta ahora!” Tiffany la empujó.
“Sí, vamos, Tae, adelante.” Taeyeon miró fijamente a Sooyoung.
"Bien." Se dio por vencida, al ya no encontrar una buena excusa.

Se sujetó de los hombros de Tiffany y saltó lo más alto que pudo. Tiffany la atrapó y tropezó unos pasos, pero finalmente se estabilizó.
Su cabello olía a melón, pensó Taeyeon.
La cortita trató de contenerse, pero estar tan cerca de Tiffany hizo que  todo el amor que sentía, doliera dentro de ella. Justo, como temía que lo hiciera. 
Puso sus brazos alrededor del cuello de Tiffany e intentó no caerse cuando comenzaron a caminar.

La luna llena fue lo único que dio luz a su escena. Todo estaba en silencio, a excepción de aquel  sonido, provocado por la brisa entre los árboles, a  lado de la carretera.
Tiffany tropezó y Taeyeon chillo en su espalda, con Hyoyeon y Sooyoung vagando detrás de ellas, metidas profundamente en su conversación.
Taeyeon se atrevió a echar un vistazo a las chicas, y oyó que Sooyoung se reía en voz alta por una de las bromas de Hyoyeon.
Ella asintió con la cabeza, entre sorprendida y divertida.
Oh, Sooyoung.

Al llegar a una área despejada, saltó de la espalda de Tiffany hacia el campo.
“¡Listo, libre de las ranas!”
Taeyeon asintió con la cabeza. No quería decir nada. La alegría en la voz de Tiffany la hizo querer gritar llena de culpa.
Sooyoung y Hyoyeon las alcanzaron y Taeyeon fue salvada.
"Wow ..."
El murmullo de Hyoyeon despertó a Taeyeon de su aturdimiento, y  observo a su alrededor. El campo parecía milagroso,  estando encima de él. La niebla era lo suficientemente gruesa, como para no poder ver el camino de donde salían.
"Es asombroso." El miedo de Tiffany parecía haber desaparecido, y Taeyeon no podía dejar de preguntarse ... si era por culpa de ella.

Caminaron lentamente por el campo, y el frío de la noche de mediados de Agosto, atravesó sus delgadas chaquetas. Sooyoung y Hyoyeon se alejaron de nuevo, y tanto, como Taeyeon temía estar a solas con Tiffany, no quería molestarlas