Las cuatro chicas terminaron de desayunar y luego de haber lavado la bajilla se armaron de escobas, paños y plumero para hacer el aseo del departamento. Intentaban hacer una jornada completa de aseo por lo menos dos o tres veces al mes, pero al pasar tanto tiempo trabajando y la mayor parte de las veces el tener que estar fuera de casa habían veces que podía pasar un mes completo y no se les daba el tiempo para limpiar o las energías para hacerlo, de esta forma los muebles acumulaban una gruesa capa de polvo y se veía todo muy descuidado.

Jugando piedra papel o tijeras decidieron donde limpiaría cada una Hwasa y Solar se dirigieron a arreglar las habitaciones, mientras que Wheein y Moonbyul se dedicarían a asear la sala de estar y la cocina entre ambas. Después de mucho sacudir y limpiar Moonbyul tomo una escoba con un paño en su parte posterior y empujando el trozo de tela contra el suelo comenzó a correr de un lado para el otro de la sala de estar, frotando el piso con el paño poco a poco lograba devolverle su brillo. De un momento a otro se detuvo frente a Wheein y con la escoba frente a su cuerpo poso una de sus manos sobre la otra sostenidas en la punta de la barra del escobajo.

Moonbyul: Realmente no veía venir eso, creo que aún no puedo digerirlo por completo. -Dijo a Wheein refiriéndose a su relación con Hwasa. –

Wheein: Ya supéralo, no es la gran cosa.

Moonbyul: ¿Cómo que no es la gran cosa? No le puedes bajar el perfil a esto, es una parte importante de tú vida. ¿Podrías habérmelo dicho? –Declaró en un tono que denotaba un dejo de molestia y decepción. –

Wheein: Si no te lo dije fue porque nunca se dio el espacio para contarte, además estabas demasiado agobiada con el tema de Solar, no sentí que fuera prudente.

Moonbyul: Bueno, quizás tienes algo de razón

Wheein: Pero mira el lado positivo, ahora podremos ir en citas dobles. –Propuso sonriendo.-

Moonbyul: Bueno, no es como si nunca lo hubiésemos hecho

Wheein: No es lo mismo, porque íbamos en calidad de “amigas” y no como parejas… pero ahora que lo pienso no creo que sea tan buena idea…

Moonbyul: ¿Por qué no?

Wheein: A Hwasa le aburre y a ratos le irrita cuando ustedes se ponen a jugar y a coquetear, cree que son demasiado infantiles.

Moonbyul: Y es cierto. – Dijo entre risas.- Creo que ya está limpio, deberíamos ir a prepararnos para salir ahora.

Wheein: Unnie, todavía falta, aún nos queda trabajo que hacer aquí.

La mayor se acercó a Wheein y le quitó con suavidad el paño con el que la menor estaba limpiando.

Moonbyul: Eres un cachorro muy testarudo. Así está bien quisquillosa, siempre sobre-exigiendo en todo. ¿No sabes que el perfeccionismo trae mucho estrés consigo? Nunca estás conforme con nada. –Le sonrió.-

Tomando de los hombros a Wheein la hizo voltear su cuerpo en dirección a su habitación dándole un pequeño empujón.

Moonbyul: Dile a Hwasa que también se preparé, otro día volvemos a limpiar.

Wheein: Esta bien. –Dijo por fin cediendo mientras movía una mano en el aire de espaldas a su mayor. –

Encaminándose a su habitación después de dejar los artículos de limpieza en un rincón de la cocina, Moonbyul pensaba en lo que se iba a poner para vestir ese día. Probablemente le mandaría un mensaje a la Unnie de vestuario para que le diera el que ponerse, porque de ser por ella probablemente andaría por todos lados con la misma ropa como un vagabundo, su camiseta ancha, jeans gastados, el pelo amarrado y quizás una gorra, no necesitaba nada más, y siempre con zapatillas, nada de tacones altos, ni accesorios o maquillaje, a pesar de que eran muy lindos era demasiado trabajoso preocuparse tanto, pero asumía que era todo parte del show.

Al entrar a la habitación Solar estaba agachada con las piernas estiradas arreglando las sabanas de la cama de Moonbyul e intentando meterlas bajo el colchón. Al sentir a Moonbyul entrar en la habitación se quitó el cabello de la cara y la sorprendió observándola.

Solar: ¿Qué sucede?

Moonbyul: Quítate la ropa.

Solar: ¿Qué? –Preguntó tímidamente sonrojándose de pronto.-

Moonbyul: Quítate esa ropa, está sucia y luego entras a ducharte al baño, para que yo pueda limpiarme después.

Solar: aah…

La menor hizo una pausa mirando hacia el techo solo con los ojos.

Moonbyul: ¿En qué estabas pensando? –Cuestionó en una sonrisa ersa.-

Solar: ¿Nada? ¿Qué iba a pensar? –Denotó aún con las mejillas coloradas.-

Byul se acercó a Solar apoyando una de sus manos sobre el colchón mientras que la mayor rápidamente se sentó en la cama y ya casi sobre ella, a un lado de su oído musitó corrigiéndola.

Moonbyul: ¿Es muy temprano para hacer ese tipo de cosas, no crees? aún hay luz de sol. –Dijo susurrando.-

Después de un que un golpe de calor erizara toda su piel recorriendo todo su cuerpo a partir de ese susurro, Solar, completamente ruborizada, se la quitó de encima gritando. Moonbyul reía mirando lo nerviosa que la mayor se había puesto.

Solar: ¡No hagas eso! –Exclamó tomando distancia.-

Moonbyul: ¿Por qué? ¿No te gusta?

Solar titubeaba sin poder responder a la pregunta de Byul, tupida en un tartamudeo sin sentido.

Moonbyul: Okay, está bien no te sorprenderé así… como quieras. –Expreso con una sonrisa desafiante.- Mejor entraré yo primero al baño, creo que necesito un poco de agua fría…

Solar: Aish, ¡ya entra!

Moonbyul se limitaba a reír traviesa mientras entraba al baño y cerraba tras ella la puerta, amaba el jugar así con el temperamento de Solar, mientras se quitaba la ropa mirándose al espejo, se le ocurrió algo más y gritando para que se escuchara en la habitación justo antes de hacer correr el agua preguntó, “¿Estas segura de no querer entrar?”, Solar exaltada respondía gritando un “¡No!” y eso solo la alentaba a decir “Pero ahorramos agua si no duchamos ambas, hay que ser ecológicas, por el planeta, es un bien mayor” y Solar exasperada solo le respondía “¡Cállate!”. Riéndose todo el tiempo bajo el agua Byul terminó de asearse y salió del baño con una bata de amarrada en la cintura y el pelo mojado, despeinado y pegado a su rostro.

Moonbyul: Esta bien, puedes entrar ahora.

Solar: ¿Ya es mi turno? Ordené tu ropa, así evitaba que tiraras todo al suelo otra vez.

Moonbyul notó que sobre la cama habian unas prensa perfectamente dobladas la una sobre la otra.

Moonbyul: ¿Me elegiste la ropa?

Solar: Si, sólo no vuelvas a desordenar.

Moonbyul: a-ha. –Afirmo asintiendo con la cabeza.-

Se acercó a abrazarla y Solar se hizo un poco para atrás.

Solar: No, estás mojada y limpia, vas a ensuciarte de nuevo.

Moonbyul: No me importa.

Byul le dio un apretado abrazo y diciendo gracias se hizo un poco hacia atrás para ver su cara y moviendo un poco su pelo mientras le acariciaba el rostro se acercó para besarla en la frente.

Solar: Aing~

Corriéndola a un lado con cariño Solar apartó a Moonbyul para entrar al baño. Byul se vistió lo más rápido que pudo y fue a la habitación de sus compañeras. Al entrar encontró a la maknae maquillándose y escuchaba a Wheein cantar dentro del baño.

Hwasa: ¿A qué se debe tu visita Byuli-ah? –Preguntó sonriendo mientras entornaba los ojos. –

Moonbyul: Lamento entrar sin tocar. Quería hacerte una pregunta.

Hwasa: Siéntate aquí y dime.

Moonbyul se sentó en la cama de Hwasa a su lado y la observaba maquillarse los ojos.

Moonbyul: La verdad es que… esto es… estoy un poco complicada, porque verás…

Hwasa: Deja de dar tantas vueltas y dime que es lo que pasa.

Moonbyul: Quiero pedirle a Solar que sea mi novia, pero no sé cómo hacerlo, no entiendo lo que les gusta a las chicas.

Hwasa: A ver ven aquí.

La menor se acerco a Byul tirando del escote de su blusa mirando hacia el interior.

Hwasa: Claro, no me equivoqué, sí eres una chica. –Dijo riendo. –

Moonbyul: Deja de burlarte, estoy hablando en serio, no sé qué hacer.

Hwasa: No tienes que saber lo que les gusta a “las chicas” solo tienes que saber que hace feliz a Solar y estoy segura que sabes que la hace feliz.

Moonbyul: Mmm… no lo había pensado de esa forma. Creo que se me está ocurriendo que hacer…

Hwasa: Entonces supongo que te fui de ayuda.

Moonbyul: Si, la pequeña Hyejin es un genio. –Dijo sonriéndole mientras ponía su mano sobre el hombro de la menor. –

Luego de que la línea Angel terminara de arreglarse bajaron para esperar la camioneta que la recogería.

Ya una vez abajo al llegar la camioneta Solar se fue sentada al lado de Byul en el asiento de atrás y Hwasa fue en frente de Wheein, la líder algo somnolienta acomodo su cabeza en las piernas de Moonbyul y esta se las arreglo para amarar el cinturón de seguridad alrededor de ella por precaución. Luego de unos minutos dormía profundamente. El sol se colaba por la ventanilla del vehículo en dirección al rostro de la mayo pero Byul no iba a permitir que el sueño de Solar se perturbara asique levantando su palma bloqueaba la luz que ya no lograba impactar en los ojos de su compañera.

Un par de horas de recorrido ya habían pasado de camino, tenían una presentación, después una sesión de fotos y finalmente un programa de radio, la tarde iba a ser larga y Moonbyul en su mente seguía planeando la propuesta de noviazgo a Solar… probablemente entre la sesión de fotos y el programa de radio les darían tiempo para descansar usaría ese tiempo para tomar acción, así que tomando su teléfono envió un mensaje a una florería que realizaba pedidos a domicilio.

Cuando Solar abrió los ojos tenía una cara de extrañeza y un  poco de espanto.

Moonbyul: ¿Qué sucede soñaste con un fantasma? –Se burlaba usando el coloquial cuento infantil coreano referido a las pesadillas. –

Solar: No, pero soñé algo de verdad ridículo.

Moonbyul: Cuéntame.

Solar: Yo era una estudiante, estaba en una gran escuela y tú eras una maestra, creo que eras maestra de idioma, yo te seguía a todos lados, por los pasillos entre clases, cuando ibas a dar tus clases e incluso te esperaba en las mañanas al llegar a la escuela. A ti te gustaba que te siguiera, pero nadie podía saber que tenías una relación “preferencial” hacia una alumna.

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Moonbyul: Suena interesante…

Hwasa escuchando la conversación se entrometió.

Hwasa: ¿Y quién no fantaseó con algún profesor en la escuela? A mí me gustaba la maestra de deportes.

Wheein: ¿La que te odiaba? –Preguntó Wheein riendo. –

Hwasa: Si, ella.

Moonbyul: ¿Por qué te odiaba?

Hwasa: Digamos que le decía cosas que le hacían sentir… incomoda.  

Moonbyul: …Perturbador. –Dijo con voz temblorosa. –

La camioneta se detuvo y el grupo bajo de la camioneta listas para subir al escenario. Caminaros juntas acompañadas de los agentes de seguridad y su manager, era una presentación simple y de no mucho tiempo así que solo necesitaban probar los audífonos para luego subir al escenario. Tras bambalinas las tres unieron sus manos antes de subir a la plataforma gritando “¡¡Uno, dos, tres, hoi!!” y ya estaban listas para el show. Cantaron para todo el público, jugaron entre ellas en el escenario y en general todo el show fue un éxito a pesar de algunos pequeños detalles en el audio que se produjeron por omitir las pruebas de sonido más elaboradas previamente, pero relativamente estaba todo bien.

Al terminar el Show dieron las gracias a los asistentes y a toda la producción del evento y se retiraron a la sesión de fotos. Moonbyul volvió a mirar su celular y al caminar a la camioneta para llegar al lugar donde habían sido citadas se separó un poco del resto, Solar lo notó de inmediato y se acercó a ver qué pasaba. Moonbyul al ver a Solar acercándose se guardo el teléfono en el pantalón.

Solar: Que escondes.

Moonbyul: ¿Yo? …Nada.

Solar: ¿No hemos empezado y ya estas engañándome?

Moonbyul: No estaba haciendo nada malo.

Solar: Más te vale no atreverte.

Moonbyul le sonrió y le tomo por detrás, mientras que tomando el cabello de la mayor lo entrelazaba sobre su cara impidiéndole ver por dónde estaba caminando.

Diciendo que se negaba a dormir para prevenir otro sueño extraño Solar se sentó en el asiento de adelante esta vez y Byul como siempre tomó el asiento de atrás y el corto camino hacia la sesión se fueron comentando el espectáculo que habían dado y los detalles, de la producción y sobre el público.

Byul seguía en su celular y se le ocurrió enviar un mensaje a Wheein para que le ayudara esta vez a distraer a Solar para darle una sorpresa. Chateaban por Line dentro del mismo vehículo y Moonbyul le explicaba el plan a Wheein. La tarea de la menor era tener a Solar 10 minutos alejada de la sala de espera, llevársela al baño, a recorrer el estudio fotográfico, lo que fuese necesario para mantenerla lejos durante 10 minutos y así poder recoger en la puerta del edificio un ramillete de flores especial que había pedido a una florería.

A penas y llegaron al edificio la Manager fue a encargarse de los últimos detalles de la sesión y a acordar con el fotógrafo los tiempos y lo que necesitaba para trabajar. Simultáneamente Moonbyul muy nerviosa pasó por el lado de Wheein apretando ligeramente su brazo, esta era la señal para hacer desaparecer a Solar.

Subieron juntas las cuatro a la sala de espera como era lo normal y Wheein le rogó a Solar que la acompañará al baño del piso de arriba, porque supuestamente no se sentía muy bien. Solar preocupada por la menor accedió y del brazo se esfumaron por la puerta de las escaleras del edificio. Moonbyul se desasía en nervios pensando que algo pudiese salir mal en la sincronización de los tiempos o el que Solar se diera cuenta, pero superando esto le dijo a Hwasa de su plan y ella cuido de que no apareciera hasta que estuviese todo preparado.

Moonbyul corrió hasta el primer piso del edificio y volvió a llamar al repartidor del local al que había contactado, el diciéndole que estaba a una calle logro bajarle los niveles de ansiedad en una frase. Al llegar en un pequeño auto de entregas pagó el ramillete viendo que era perfecto, era de rosas celestes como la ropa que eligió para ella en la mañana y rosadas como las que estaba usando la mayor. Volvió a subir rápidamente cuidando de que el ramo se encontrara en las mejores condiciones.

Al llegar a la sala se dio cuenta de que Solar no había llegado, y Hwasa le hacía señales de que todo marchaba bien, aun así se asomaba un poco al pasillo cada dos minutos para ver si venían y su corazón latía cada vez más rápido.