Taeyeon no podía entender, cómo era posible, que las cosas nunca salieran como ella esperaba.
La noche después de su confesión,  tendría que haber sido su última noche juntas.
O después de la noche bajo la luna, algo tendría que haber pasado. Pero al parecer, Tiffany sólo confundía  más a Taeyeon con sus acciones. Una semana había pasado, desde que durmieron abrazadas, y solo habían hablado una vez.

Taeyeon supuso que Tiffany había tomado lo que quería, pero ahora, definitivamente había terminado.
Comparado con la primera vez, que se suponía ya habían terminado, esta vez, dolía mil veces más. Taeyeon había probado lo que pudo haber tenido... y simplemente se esfumo. Ahora no sabía qué decir, ni a quién hablarle o a quien acudir para sentirse mejor.
Acepto que la mejor solución... era no nunca decir nada. Aunque soñara con los cálidos brazos de Tiffany sobre ella, como aquella noche en la que durmieron juntas.  Y despertar cada mañana con una sonrisa, y  sentir  su corazón pesado, al darse cuenta que Tiffany no estaba con ella.

La cosa física llamada amor, parecía estar en una constante sobrecarga en su interior – dolía- su corazón golpea como un loco contra su pecho, y se hinchaba un millón de veces cuando se perdía en sus fantasías ... para que al final, solo  deseara desaparecer.
De algún modo, encontraba consuelo en el verano, incluso si este estaba por terminar. Pasó la mayor parte de su tiempo en el porche. Escribiendo. Imaginando cosas que podía decirle a Tiffany y anotando todas las cosas que nunca le diría. O a cualquier otra persona.
Por supuesto, Sooyoung sospechaba que algo andaba mal con la chica. Incluso le pregunto  en varias ocasiones ¿Por qué estás tan callada?, ¿Por qué no me escribes o  llamas?, pero Taeyeon no sabía qué decir.
Si Tiffany se hubiera quedado con ella, le habría contado gustosamente a Sooyoung. Pero ahora ...
Todo era más difícil que antes.
Y mientras cerraba los ojos y se enfrentaba al sol, trató de convencerse que nada, duraba para siempre. Y que en algún momento, esos sentimientos desaparecerían por completo. No dudaba que lo harían, algún un día, tal vez. Y había una pregunta que se mantenían ardiendo dentro de ella, un pensamiento que no podía sacar de su cabeza...
¿Cuál era el punto de todo?
A veces, la ira venía y le hacia compañía.

Con Tiffany, siempre se trataba del destino. La chica era una firme creyente del destino; donde todo sucedía por una razón. Además, tenía una obsesión enorme con los cuentos de hadas y las películas de Disney, en ese mundo, donde simplemente no había escapatoria para las dos personas que estaban destinadas a terminar juntos .
Taeyeon se rio ante la idea ... ¿Cuántas veces había puesto sus brazos alrededor de Tiffany cuando esta última, comenzaba a llorar  al ver a La Bella y la Bestia?
Taeyeon intentaba ignorar su amor por Tiffany, pero nunca cambiaría sus recuerdos por nada. El olor de su cabello, el sonido de su voz, su sonrisa y risa.Cada cosa, eran su mundo para ella. Y era lo único que le quedaba de Tiffany.

Por supuesto, había pensado en llamar a Tiffany muchas veces. Pero se detenía por su propio miedo a ser una carga para Tiffany. Terminaba maldiciendo por su confusión e intentaba decidirse qué era lo correcto.
¿Luchar por ella? O ¿Respetar su decisión y dejarla ir?
Jamás había estado tan confundida en toda su vida. El repentino cambio de de Tiffany, la dejó sin saber cómo relacionarse con  ella.

El móvil de su mesita vibró fuerte y Taeyeon se despertó con un sobresalto, odiando el fuerte sonido. Confundida, reviso el reloj.
1 PM.
Fantástico.
Levanto su teléfono y el nombre de Sooyoung brilló en la pantalla.

Taeyeon ~ ¿Qué vas a hacer hoy?

Se sentó en la cama, tratando de recordar qué día era. Y si acaso, iba a hacer algo.
Se levantó lentamente, y sintió que la cabeza le daba vueltas. Se volvió a sentar y tiró un poco de sus pantalones grises.
Sábado.
Uno de los días más tranquilos de la semana.

No sé... ¿qué vas hacer tu? ... Gracias por despertarme, creo que lo necesitaba.

Taeyeon se levantó de nuevo, aliviada por la falta de mareo, y salió al pasillo.

¿Durmiendo? Oh que mal Tae... Y, bueno... No sé, creo que Hyoyeon va a venir... 

¿Quieres......quieres que nos reunamos?

Pensó en la oferta mientras subía las escaleras. ¿Sería bueno ver a ambos pájaros enamorados,  tratando de ocultar su relación?
... bueno, en realidad, sí.
¿Ser testimonio del amor, que ambas suponían no estaban mostrando?
Una pregunta diferente.
Llegó a la cima de las escaleras y encontró el segundo piso vacío. Entró en la cocina, donde, como todas las mañanas, estaba cegada por el brillo de la habitación.
Paredes blancas. Techo blanco. Cortinas blancas. Pisos grises.
Se frotó los ojos y dejó el teléfono sobre la mesa, olvidándose de Hyoyeon y Sooyoung por un minuto. Se acercó a la ventana y, distraídamente, vio hacia la puerta principal, donde su coche faltaba. Su familia no está...
Saltó cuando su teléfono vibró con un fuerte y oscuro ruido en la mesa. Y enseguida, llevo su mano a su pecho.
"Para varias, Sooyoung enviándome mensajes de nuevo, preguntando si la estoy ignorando ..." pensó sin ver y se acercó a la mesa.
Tomo su teléfono y estuvo a punto de soltarlo, un segundo después.
Tiffany
Inmediatamente, su corazón comenzó a golpear más fuerte de lo que era capaz de soportar. Jugueteó con los botones, hasta que finalmente logró abrir el mensaje, sintiendo como sus manos se volvían sudorosas.

Estaré en tu casa en 10 minutos

Taeyeon se giró. ¿Se olvidó de algo? ¿Cuándo hablaron? ¿Había quedado de verse?¿O solo era Tiffany, siendo su yo regular?
Dejó caer su mano a su costado, mientras repasaba la silenciosa habitación.
¿Qué diablos, voy a decirle?
Intento pensar en alguna manera de evitarla - cualquier excusa, decirle a Tiffany que no estaba en casa, que estaba enferma, ocupado, o ...
Y de repente se le ocurrió, que si Tiffany iba a su casa de improviso ... tenía que ser porque algo quería. ¿Algo iba a decirle?.
Su corazón no quería reducir su velocidad. Por un segundo, sintió como si se hubiera congelado, sin embargo, su corazón seguía caliente.
Bajo la mirada.
Estaba de pie, en pijama, y el cabello hecho un lío.
Gritó y corrió tan rápido como pudo,  para conseguir algo de ropa.
Me alegro tanto que nadie esté en casa, pensó enseguida.

Vestirse, arreglarse el cabello y cepillarse los dientes. No tomo tanto tiempo como pensó.
Nunca me di cuenta que 10 minutos, realmente fueran tanto tiempo.
Cuando estaba completamente lista para ver a Tiffany, aun faltaban 5 minutos.
Tortura.
Caminó por su habitación, y trato sentarse en su cama, pero era imposible quedarse quieta.
Tiempo, te odio
Terminó saltando de arriba y abajo, pensando en otras cosas, como ...
películas, o ...
Tiffany
... música, o ...
Tiffany
... Sooyoung, o ...
Tiffany
... su familia, o ...
cualquier cosa, siempre se redirigía a Tiffany.

El timbre sonó. Y Taeyeon corrió.
Se detuvo frente a la puerta, recuperando el aliento, para evitar verse como si hubiera visto un fantasma ... y abrió la puerta.
Ella estaba allí. El último trozo de duda desapareció de la mente de Taeyeon, mientras contemplaba la belleza en una chaqueta azul clara.
"Hola."
Taeyeon logró encontrar su voz.
"Hola." 
Ninguna de las dos se movió. Taeyeon no estaba segura de si debía abrazarla, o preguntarle por qué estaba allí,  gritarle o dejarla entrar...
"¿Estás bien? Parece que  viste un fantasma."
…me lleva
Taeyeon sonrió torpemente y miró al suelo.
"No, estoy bien."
El silencio de nuevo. Siempre inoportuno. Tiffany cambió su peso entre sus pies. Taeyeon vio los zapatos de Tiffany, antes, de que su mirada subiera por las piernas de Tiffany, cubiertas por unos jeans negros, hasta llegar a su chaqueta.
"Te ves caliente."
Taeyeon resistió llevar su mano contra su boca, cuando se dio cuenta, de que acababa de decir. Tiffany inclinó la cabeza.
"Quiero decir ... esa chaqueta ... se ve caliente.”
Bueno, tenemos en un buen comienzo.
"No, en realidad no, pero se ve bien" dijo Tiffany, sonriendo a la torpeza verbal de Taeyeon.
Y el silencio de nuevo. Taeyeon se balanceó un poco donde estaba.
"¿Quieres entrar?" preguntó Taeyeon finalmente.  Y Tiffany sólo la miró.
“No, me preguntaba, si podemos ir a dar un paseo.”
"¿Un paseo?" Taeyeon levantó las cejas.
“Sí, caminar por el bosque.” Tiffany sonrió, con una mirada suplicante plasm