Neverland

Description

Esto es un fanfic viejo mio. Gane un concurso de HATO con èl. Bajo el nombre de Kalun Gengchullie/Kaoikikame. 

Muchos creen que Heechul sòlo es un sujeto mal educado, malcriado y un dolor en el trasero. Pero para Hangeng ciertos detalles de èl, le hacen ver que hay mucho màs alla de eso. FLUFFY. Hanchul en un departamento <3. 

 

Foreword

Suspiro. 

Tal vez para muchas personas, aquel sonido al otro extremo del lugar resultara fastidioso, tal vez, muchos no podrían soportar más de dos días escuchando aquella escandalosa voz, como él la escuchaba cada mañana.

Sin embargo, a Hankyung aquello le hacía sentir esa tranquilidad que tanto anhelaba cuando estaba lejos, como si todas las piezas del rompecabezas al fin cayeran en su lugar. 

Todo era como debería ser.

El que Hankyung preparara la cena para Heechul mientras éste esperaba en la sala, cantando alguna de sus extrañas canciones o incluso viendo una de esas películas infantiles que ya habían sido vistas más veces de las que Hankyung pudiera recordar, era una escena que ya formaba parte de su vida.

Hankyung alcanzó a ver a Heechul desde el rabillo del ojo, al parecer persiguiendo a Heebum. Luego, un golpe, seguido de un quejido y una sarta de maldiciones de las que sólo alcanzó a distinguir: “gato”, “maldito” y “sudar”. Escuchó los pasos de Heechul rápidamente acercándose a la cocina, y al fin, la curiosidad le ganó, volteándose para ver que había pasado.

“Heechul deja de darle la comida de Rong Rong a Heebum”,  Hankyung regañó, con una voz que indicaba paciencia. Casi podía imaginarlo rodar los ojos. Heechul simplemente le ignoró mientras vaciaba la bolsa de croquetas en el tazón de Heebum.

Hankyung suspiró, masajeándose el cuello mientras lo observaba.  A veces se daba cuenta que no podía apartar la mirada de la figura de Heechul. Era algo que no podía evitar, sus ojos simplemente se clavaban sobre él y no había forma que pudiera alejarlos.

Hankyung odiaba pensar en Heechul como alguien hermoso, porque sentía que esa palabra lo limitaba. Incluso se quedaba corta, Heechul era más que un rostro bonito, Heechul era único.

No existía una palabra, una frase que pudiera describir perfectamente lo que Hankyung sentía hacia Heechul. Hankyung sabía que Heechul era de todo menos perfecto, pero a pesar de aquello, Heechul era una persona que no podía imaginar fuera de su vida.

De repente, el sonido del refrigerador cerrándose le hizo volver a la realidad.

“¿Qué estás haciendo?”, Hankyung suspiró cuando notó que Heechul estaba colocando queso sobre el tazón de Heebum.

“Si Heebum se come esto, entonces lo podré comer”, respondió Heechul tranquilamente. Hankyung lo miró con extrañeza.

“¿Y cómo llegaste a esa conclusión?”, preguntó Hankyung. Heechul le lanzó una mirada de exasperación, como si la respuesta fuera obvia.

“No deberías de darle ese tipo de cosas a Heebum, no sabes si le hará daño”, dijo Hankyung.

De pronto, recordando que el arroz aún estaba en el fuego se giró, dándole la espalda.

“Heebum es listo”, aseguró Heechul, “si la comida es mala, él lo sabrá”.

“Si después se enferma, no pienso llevarlo al veterinario”, amenazó Hankyung con un suspiro resignado.

Heechul sonrió con malicia. “No te preocupes, si eso pasa, Siwon o Kangin lo harán por mi”, dijo y salió de la cocina dejando a Hankyung con la boca abierta.

Sí, definitivamente Heechul no era perfecto.


Cuando la cena estuvo lista, se sentó a esperar a Heechul, pero este no apareció. Lo cual era raro pues por lo general, apenas la comida era servida, Heechul ya estaba esperando.

Extrañado, se paró a buscarlo, después de unos minutos, recorrió casi todo el departamento, sin éxito.

Sólo quedaba su propia habitación, que pensándolo detenidamente, resultaba ser el lugar más obvio. Abrió la puerta, esperando encontrar a Heechul, pero no había nadie adentro.

Un sentimiento de incertidumbre empezó a nacer en él. Estaba a punto de salir a buscarlo cuando un movimiento extraño captó su atención. Se acercó lentamente hasta que pudo distinguir que aquello era la cola de Rong Rong, que sobresalía desde la puerta de su armario.

Abrió la puerta con curiosidad, y la escena con la que se topó lo dejó boquiabierto.

Heechul estaba sentado sobre el suelo, sus piernas dobladas a la altura del pecho, con Heebum atrapado entre sus brazos mientras Rong Rong yacía acurrucado a sus pies.

Hankyung parpadeó asombrado, sus labios curvándose en una sonrisa. Nunca pensó que sería testigo de una escena como esa, y sabía que difícilmente podría volver a repetirse.

Tomó a Heebum y a Rong Rong con delicadeza, cuidando de no despertar a  Heechul y los sacó de la habitación.

Regresó entonces por Heechul, y lo cargó suavemente, las manos de Heechul inconscientemente aferrándose a la tela de su camiseta. Hankyung no pudo evitar la sonrisa que nació de sus labios. Pequeños gestos como ese lo hacían darse cuenta cuánto amaba al hombre que tenía entre sus brazos.

Lo depositó lentamente sobre la cama, pero al intentar reincorporarse, las manos de Heechul lo retuvieron. Hankyung suspiró resignado, pensando en el arroz que había sido olvidado sobre la mesa.

Acomodó un poco a Heechul para recostarse junto a él, rodeó su cintura con uno de sus brazos y lo acercó a su cuerpo para poder sentirlo más cerca. Sólo en ese momento Heechul lo soltó.

Su relación no era a base de palabras, no era a base de grandes discusiones, incluso había veces que apenas intercambiaban algunas frases. No era porque su coreano fuera malo, sino porque no había necesidad de palabras cuando cualquier gesto lo decía todo.

Heechul escondió su rostro en el espacio entre su cuello y su hombro, hasta que Hankyung pudo sentir su respiración acariciar su piel.

Heechul podía ser malo expresando sus sentimientos, pero para Hankyung siempre había sido fácil entender lo que Heechul quería decir. Nunca supo cuando empezó a leer entre líneas, pero Hankyung sabía que esa sonrisa sincera era dirigida sólo para él.

Sintiendo el cansancio dominarlo, depositó un suave beso sobre la frente de Heechul y cerró los ojos, dejándose llevar por el suave vaivén de su respiración.

Con el rostro de Heechul grabado en su mente, cerró los ojos y acompañó a Heechul a Neverland.

Comments

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Evelyn-Everdeen
#1
You'll probably never see this (and I hope you forgive me for using English because it's been too long since I've actually expressed myself in Spanish), but this is really cute! Thank you for sharing it on here.
nihaoma #2
Bella narración, creo haberla leído pero no estoy segura。 De cualquier forma, fue emocionante leerla aquí, buenos relatos te hacen imaginar toda una película. Thank you very much!